REINGENIERIA HUMANA

REINGENIERIA HUMANA

LAS RELACIONES HUMANAS AL SERVICO

DE LA PRODUCTIVIDAD

SALVADOR MERCADO

I N T R O D U C C I O N

La eficiencia con la que una organización alcanza sus objetivos y satisface las necesidades de la sociedad depende que tan bien realiza su trabajo los gerentes. Si no administran debidamente la organización, no podrán lograr sus metas. El desempeño de sus organizaciones como grupo, es un factor decisivo en la actividad de una sociedad o país.

El desempeño con que los gerentes cumplen sus obligaciones es tema de muchos debates, análisis y confusión con muchos países. Debates igualmente intensos han surgido respecto a la eficiencia en las organizaciones.

La eficiencia, o sea la capacidad de hacer correctamente las coas, en un concepto de entrada-salida (insumo-producto). El gerente eficiente es aquel que logra las salidas, o resultados, que corresponden a las entradas (mano de obra, materiales y tiempo) utilizadas para conseguirlos. Los que logran minimizar el costo de los recursos con que obtienen sus materias primas de manera eficiente.

La responsabilidad de un gerente requiere desempeño que sea eficiente y eficaz a la vez, pero aunque la eficiencia es importante, la eficacia es más desiciva. Para que la eficiencia sea clase del éxito de una organización, es necesario que el gerente aproveche al máximo las relaciones humanas.

I. La conducta humana en los negocios

Comportamiento humano.

Los individuos son diferentes entre si, pero con frecuencia se actúa pensando que los demás deben entendernos de la misma forma en que nosotros los condiremos. La singularidad de cada persona rige su comportamiento. Desarrollamos nuestra habilidad para entender a otros individuos son conocernos a nosotros mismos, conocernos incluye el reconocimiento que estamos dispuestos a la defensiva; admitir que con frecuencia hacemos cosas para evitar vernos tal como somos, ayuda a destruir nuestra propia imagen, mucho de lo que la gente hace tiene el propósito de agradar a los demás y de ser bien aceptado por ellos. Una consecuencia natural de esta fuerte necesidad de agradar a otros, es la tendencia a cubrir nuestra “autentica” manera de ser presentar un “frente” ante ellos, y que esperamos que le guste. Evitamos ser ofensivos a base de no mostrar lo que efectivamente somos. El hecho de evitar un contacto abierto y genuino puede ser evitar dolor, pero también inhibe el desarrollo del individuo hacia una existencia de reprocidad.

Podemos aprender a cambiar nuestro comportamiento y nuestra propia imagen, con el fin de lograr

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