Renacimiento de kant
Enviado por Gustavo Trejo • 13 de Febrero de 2018 • Ensayo • 2.362 Palabras (10 Páginas) • 919 Visitas
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El renacimiento de Kant
Instituto : universidad mexicana
Alumno: Gustavo Adolfo tejo leal
Grupo:pso1ma211
Cuatrimestre: primero
Asignatura :filosofía
Docente : Adriana Flores Padilla
Firma
Fecha:21/11/17
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Introducción:
El presente trabajo habla acerca del Renacimiento como un parteaguas en el pensamiento científico, artístico y religioso para él hombre, proporcionando un nuevo sentido al mundo y a sus habitantes, ya que se descubren nuevos territorios llenos de riqueza, además, se confirman teorías muy importantes y avanzadas para la época, brindando un conocimiento inimaginable, aunque como sabemos ningún conocimiento es absoluto, ya que se encuentra en constante cambio, con el fin de reafirmar nuevos conocimientos que se adapten a las necesidades de cada época asegurando así la supervivencia del mayor número de individuos.
La importancia de algunos personajes en el Renacimiento como fueron Leonardo Da Vinci, León Batista Alberti, Martin Lutero, Luis de Molina, Vives, De las Casas, Vasco de Quiroga, entre otros. Todos estos vivieron el nacimiento del humanismo, aunque algunos compartían la creencia de que Dios era dueño de los hombres y por ende de sus actos, destino e incluso de sus desgracias, la mayoría pensaba que todos los hombres eran libre e iguales por naturaleza, por ende, se debía acabar con la esclavitud, ya que todos pueden aspirar a una vida igualitaria con base en el derecho natural y que debía regir de manera internacional en lugar de las diversas formas de gobierno.
Sin duda el renacimiento también trae al hombre entusiasmo, angustia y pesimismo, ya que pone las dudas y respuestas de los hombres en sus propias manos, creando con esto un ser capaz de reconstruir un mundo nuevo, sin embargo, tendría que destruir parte del conocimiento antiguo para darle paso a la nueva época de desarrollo con ayuda de las ciencias experimentales que son las más certeras por decirlo de algún modo, ya que a través de la experimentación se puede llegar a un resultado más real ya que si nada modifica el proceso los resultados deben ser los mismos, mientras que en las sociedades día con día se encuentran en una lucha constante por la supervivencia, y por tal motivo no hay ninguna ciencia absoluta para el hombre, por eso constantemente se encuentra en busca del conocimiento.
Desarrollo:
Con la conquista del Nuevo Mundo se abrieron nuevas posibilidades para el comercio del cual derivan nuevas clases capitalistas, detonando la importancia de dos potencias importantes en el Renacimiento que eran Portugal y España. El primero destaca por su importancia en el comercio de especies, por otro lado, España con ayuda de Cristóbal Colon descubre América y con ello una riqueza no solo económica, sino también cultural y religiosa
Leonardo Da Vinci uno de los hombres más influyentes del Renacimiento, aseguraba que la naturaleza siempre tenía algo que merecía ser imitado y espera a que el hombre se encargue de estudiarla, para conocer más a fondo todo lo que lo rodea, además, aseguraba que solo mediante la ciencia podemos dominar la práctica, ya que es la ciencia experimental la que nos ayuda a observar los hechos, Da Vinci y otros pensadores como Copérnico y Kepler, aseguraban que no hay verdadera ciencia sin fundamentos matemáticos “Ninguna certidumbre puede existir allí donde no puede aplicarse alguna de las ramas de las ciencias matemáticas”[1] determinando la aplicación de las matemáticas como algo importante en la vida, debido a que las matemáticas son la base de la exactitud de cualquier experiencia, es necesario dominar la naturaleza a través de medios naturales que solo son posibles mediante la experiencia y de un cálculo matemático.
El avance matemático que se da en el Renacimiento sirve como motor para el posterior estudio y desarrollo de la física moderna, sin embargo, los nuevos humanistas concluían que “la ciencia por si sola carecía de valor y para que adquiriese valor alguno se le debía aplicar un conocimiento del alma humana”[2] quienes consideran el alma como una maravilla superior a las naturales, aunque toda la ciencia marca un cambio en la vida de la humanidad, lo importante es si este cambio se emplea para hacer el bien o el mal, o si trae consecuencias más buenas que malas o viceversa
La Edad de Oro en el Renacimiento se da con la creación de la fundación de la Academia de Florencia, uno de los primeros directores de esta academia quería probar que el alma era inmortal alegando que se podía convertir en todo incluso en Dios, se dice que un hombre debe dejar de ser un especialista para poder adquirir un conocimiento universal para poder convertirse en un hombre total, de esta manera se buscaba en la etapa renacentista que se brindara una educación totalizadora. León Batista Alberti, fue uno de los ejemplos más claros, ya que hablamos de un escritor, arquitecto, músico y un hombre de ciencia, aseguraba que “los hombres son fuentes de sus propias fortunas y desdichas”[3] pues somos responsables de nuestros propios actos que basados en la moral pueden ser buenos y malos con sus respectivas consecuencias.
La disputa dentro de las ideas religiosas da paso a la Reforma, philosofia Christi y la Contra Reforma, movimientos relacionados con el descubrimiento de nuevos conocimientos relacionados con el estudio del cristianismo. La Reforma estaba en manos del fraile agustino Martin Lutero quien se oponía a las indulgencias pues creía que detenían el desarrollo espiritual de la iglesia, en Alemania se desarrollaba el movimiento protestante que se caracterizaba por ser moralista, una de las principales diferencias entre los protestantes fue por el orden ético, sin embargo, más tarde se le añadiría un problema teológico que giraba alrededor de la libertad del hombre.
Dos de los personajes más destacados en esta disputa fueron el ya mencionado Martín Lutero y el jesuita, Luis de Molina, defensor del libre albedrío, por su parte Lutero aseguraba que “Un hombre no puede ser totalmente humillado hasta que llegue a saber que su salvación está definitivamente más allá de sus propios poderes, esfuerzos, voluntad y obras, que dependen absolutamente de la voluntad, del consejo, del placer y del trabajo de otro, es decir Dios tan sólo”[4] lo que demuestra que todo lo que hicieran los hombres no importaba, sino era aceptado por un ser supremo, dejando de lado la libertad que cada uno de los hombres tiene por naturaleza, obligándolos a vivir bajo la sombra de un Dios, por otro lado, Molina pensaba que el hombre era un ser libre y que Dios no lo podía juzgar pues lo había creado a imagen y semejanza, entonces, ¿Cuál sería el objetivo de destruir su creación?, además, limitaría su naturaleza divina, como un ser lleno de amor y bondad.
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