Trastornos psicopáticos

La piel que habito:

La película nos muestra que desde que el doctor Ledgard, un emitente cirujano plástico casi pierde a su esposa al quemarse en un accidente de coche mientras intentaba huir por abandonar a este con su hermano, éste empieza a  investigar la creación de una nueva piel con la que hubiera podido salvarla. Doce años después consigue cultivarla en su laboratorio utilizando la transgénesis con seres humanos pese a que esta es prohibida.

Él trató de curarla, aunque cuando ella fue consciente de su aspecto se suicidó, lo que provocó en su hija Norma graves problemas mentales, por lo que fue recluida en un psiquiátrico durante años. Cuando salió de allí su padre la llevó a una fiesta donde se fijó en Vicente, un muchacho con el que congenió hasta que comenzaron a tener relaciones. Entonces ella, todavía no curada y con secuelas de lo sucedido, recae, se lo quita de encima y termina desplomándose al desmayarse. Luego de esto ella elimina el contacto de cualquier hombre incluido su padre, hasta que finalmente se suicida, al igual que su madre.

Pensando que su recaída fue fruto de una violación, Robert decide vengarse del agresor de su hija, al que secuestra para someterlo a sus experimentos, quebrantando una vez más la ética médica, no sólo con los experimentos no autorizados sino también ahora con un delito como lo es el secuestro y futura extorción de la víctima.

Someterá a su “conejillo de indias” a una operación de cambio de sexo, y poco a poco lo transformará en una mujer muy parecida a su esposa, todo ello en la finca familiar, que por su aislamiento podría simular una cárcel cuyo cuidado cae en manos de Marilia, el ama de llaves, que se encarga de atender las necesidades de Vera, nombre que le da a su "creación" (experimento). Este se resigna a su nueva personalidad ya que se encontraba completamente sola y sin ayuda, aunque la llegada de Zeca, lo cambió todo. Pues Zeca cree que Vera es la esposa de Ledgard, la que huyó con él y a la que él creyó muerta tras el accidente. Al encontrarla en la finca decide volver a acostarse con ella, pero ésta se niega, por lo que la viola. Vera intenta huir tras cada situación de horror que ha vivido, y al no poder hacerlo intenta suicidarse, pero no lo logra. Ledgard nota entonces de que su creación no es tan perfecta, pues su piel es muy frágil, por lo que continúa sus investigaciones hasta conseguir que tenga una piel más fuerte y firme.

Poco a poco las secuelas de Robert parecen olvidados y cada vez ve más cerca la culminación de sus propósitos, pues Vera parece cada vez más receptiva hacia él y él se siente de nuevo feliz después de muchos años. Pero Vera quería ser libre por encima de todo, pues estaba ahí en contra de su voluntad y siendo alguien quien en realidad no es, se encontraba viviendo la vida de alguien más. Y por ello le tiende una trampa a Robert, para así poder regresar a su hogar.

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