El Arquitrabe de la Línea recta
Enviado por doriiz0697 • 3 de Noviembre de 2012 • Monografía • 2.425 Palabras (10 Páginas) • 550 Visitas
Una hermosa custodia de perlas y rayos, de los cuales es sujetada por la figura que le sirve de pedestal, es de fina y exquisita talla que parece filigrana, ataviada con helicoidales y cruzadas hojas vegetales con perlas, amplias mangas enrolladas bajo sus brazos alzados, además de alto y elaborado peinado con adorno de una gema preciosa, también le adorna un rostro en miniatura ubicado la parte media inferior de la vestimenta – hacia abajo, otro rostro similar ahora erosionado, decorado la base del conjunto que expone al santísimo-; motivo rodeado a su vez por ocho querubines entrelazados por sus alas. Integran el rosetón dos ángeles turiferarios a los lados de la custodia, uno en vuelo – en el intradós de la clave- soporta sobre sus espaldas el conjunto del ostensorio, otros ocho ejecutan y dirigen el sonido de sus clarines hacia el conjunto sagrado; cuatro arcángeles, dos orando suspendidos sobre nubes, y otros dos con indumentaria vistosa, casco con plumas y enagüilla indígena, todos dispuestos como pares simétricos en los dos gajos verticales del rosetón, además de veneras labradas, racimos de uvas, roleos, flores de lis y motivos vegetales. El centro de este ventanal mixtilíneo se embellece con un herraje de barrotes radiales que sostiene en el centro al sol y la luna animados.
Las enjuntas del óculo alojan a los cuatro doctores de la iglesia latina ataviados con sus atributos y la indumentaria de su jerarquía; abajo a la izquierda, san Agustín, obispo di hipona; a la derecha, san Ambrosio, obispo de Milán; arriba a la izquierda, el papa san Gregorio magno; y a la derecha, san Jerónimo, con ropaje y sombrero cardenalicios.
Sobre las columnas de este segundo cuerpo descansa el arquitrabe de la línea recta, hermoseado con veneras que muestran su valva cóncava, hojas vegetales, perlas y flores; en su parte media, la línea recta se eleva de nivel para sostener como motivo central un dosel de plumas de perlas, cinco escondidizos querubines, roleos borlas y flores, con la sagrada paloma de las alas extendidas en su interior; mas hacia arriba aparece el friso de ángeles y torsos de infantes desnudos entre hojas vegetales, singulares racimos de vid y conchas. La cornisa se apoya en pequeños modillones y los entrantes y salientes del volado están emperifollados con flores y resaltos orgánicos sin forma específica.
El tercer cuerpo, también de cinco calles, es más pequeño que los anteriores y esta incrustado en el remate que se extiende hacia sus lados. La longitud es tal, que las cinco calles que lo integran corresponden en su plenitud a las tres calles centrales de los cuerpos inferiores. Tiene un nicho en cada calle, para alojar a esculturas sobre peana; la primera talla, de figura desproporcionada, representa a san Simón, que en la diestra tiene la sierra –su símbolo- y en la otra mano un libro abierto; luego un escultura de brazos mutilados y sin elemento que permitan su identificación; en el centro, la efigie del señor Jesucristo – que representa horadaciones rectangulares en la parte superior y en ambos lados de la cabeza; lugar de anclaje de un posible nimbo_ en actitud apacible, porta un recipiente esférico con la mano izquierda y la otra esta mutilada; a su izquierda, san Felipe levanta un cuchillo de mediana longitud con la diestra y dirige la mirada hacia el libro abierto que mantiene en la otra mano; al final, un apóstol también de figura desproporcionada de grandes manos y sin detalles suficientes para reconocerlo con certeza, quizá sea san Matías.
Los arcos de las hornacinas de este tercer cuerpo son de medio punto, a excepción de la que aloja al señor Jesucristo que es pentalobular y le adornan en la bóveda largas plumas con perlas; las peanas sobre las cuales descansan san Simón y san Matías tienen labradas cuatro aves con alas desplegadas, garras afiladas y el pico corto y curvo. Las repisas de los otros apóstoles están decoradas con alargadas hojas vegetales, roleos y perlas, mientras la central ostenta ornamentaciones como un grutesco, un racimo de uvas y collares de perlas.
Los soportes de la tercera fabrica son variados en su estructura y decoración, pues las columnas de los extremos, de base trabajada con hojas vegetales aderezadas en perlas y con fuste vestido con marcados resaltos de follaje y collares de perlas, exhiben en cada lado una trenza dispuesta como una columna dorsal, de la que cuelga en la parte inferior un abundante racimo de uvas. Los capiteles son corintios, y los del soporte que le sigue tienen una hilera de esbeltas hojas de acanto con perlas y erosionadas volutas, se repite simétricamente del lado opuesto como pilastra cariátide que luce tocado de plumas, peinado rizado y rica vestimenta de hojas vegetales con perlas, volutas y abultado racimo de uvas, las cuales reposan sobre bases decoradas por las frecuentes hojas con perlas. El par de pilastras centrales y de aparente simetría que flaquean al nicho principal descansan, cada una, en repisa decorada con motivos de diseño geométrico y orgánico, en su cara interior aparecen tres infantes semidesnudos, dispuestos uno sobre otro, tienen en la mano, unos, frutos de vid y los de la derecha portan mazorcas. Los capiteles son proporcionalmente enormes y contiene plumas con perlas y enroscadas volutas.
La línea horizontal del arquitrabe pone a la vista las reiteradas conchas cóncavas justo sobre los capiteles de las columnas y pilastras de esta tercera fábrica. El friso muestra entrantes y salientes; los salientes que tienen su par simétrico del lado opuesto, en los extremos son resaltos con apariencia de mariposa estilizada; el par siguiente son querubines de alas alzadas hasta el borde de su cabeza y plumaje dispuesto como imbricaciones (recientemente le tallaron el rostro a la pieza inconclusa del lado derecho; proveniente, probablemente de la restauración de la cornisa de 1964), y el par central muestra labrados que sugieren la imagen de elegantes copones; los entrantes, cuya talla es menos afortunada, adoptan aspectos de hojas vegetales en forma caprichosa.
Termina este añadido arquitectónico con la parte del entablamento sostenida con modillones de alineación algo apretada, y los salientes del vuelo de la cornisa se decoran con resaltos de diseño orgánico, amorfos adornados con perlas y estrellas irregulares. Muy próximos a los extremos de esta fábrica, le flaquean al mismo nivel un par de perillones que tienen labrada en la basa un ave de pico corto y garras afiladas y rematan la línea larga vertical formada por las columnas extremas de los dos cuerpos interiores.
El remate del imafronte se extiende desde el final del segundo cuerpo, envolviendo al tercero hasta concluir por arriba en un par de grandes volutas centrales que se abren para dar cabida a una hornacina con la escultura sobre una pequeña peana del pantocrátor, de tipo románico,
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