Los Evangelios: etimología y origen
Enviado por antonelalita • 31 de Mayo de 2014 • Ensayo • 1.877 Palabras (8 Páginas) • 335 Visitas
Segundo año
Los Evangelios: etimología y origen
Etimológicamente la palabra Evangelio proviene del griego y significa buen mensaje, que es la buena nueva del cumplimiento de la promesa hecha por Dios a Abraham, Isaac y Jacob de que redimiría del pecado a su descendencia por medio de su Hijo unigénito, Jesús, quien murió en expiación por el pecado de toda la humanidad, y que resucitó el tercer día para el arrepentimiento y perdón de los pecados de todo aquel que crea en Él.
El Evangelio fue escrito por los primeros discípulos a finales del siglo I y principios del II, recogiendo las primeras predicaciones y la vida de Jesús de Nazaret, y cuyo núcleo central es su muerte y Resurrección. La palabra Evangelio fue empleada por primera vez por Pablo de Tarso en los escritos a las primeras comunidades cristianas en la primera carta a los Corintios (1ª. Corintios 15:1).
En total, el término Evangelio es usado en 76 ocasiones en el Nuevo Testamento, de las cuales 60 se encuentran en las Cartas de San Pablo. Sin embargo no existe ninguna mención de esa palabra en el Evangelio de Juan ni en el de Lucas, aunque aparece en los Hechos de los Apóstoles, cuyo autor fue Lucas.
Los evangelios sinópticos y los canónicos
Los análisis de los estudiosos bíblicos se han centrado en lo que se denomina problema sinóptico, es decir, las relaciones literarias existentes entre los tres Evangelios sinópticos: Mateo, Marcos y Lucas, ya que el cuarto Evangelio, el de Juan, no es considerado sinóptico debido a que no sigue el esquema de los otros tres y dispone de fuentes propias. Sin embargo los cuatro Evangelios son considerados como canónicos por la Iglesia Católica, la cual, en la Constitución Dei Verbum del Concilio Vaticano II, señala que la Iglesia siempre ha defendido y defiende que los cuatro Evangelios tienen origen apostólico, pues lo que los Apóstoles predicaron por mandato de Cristo, luego, bajo la inspiración del Espíritu Santo, ellos y los varones apostólicos nos lo transmitieron por escrito, fundamente de la fe, es decir, el Evangelio en cuatro redacciones, según Mateo, Marcos, Lucas y Juan. Del elevado número de Evangelios escritos en la antigüedad, sólo estos cuatro fueron aceptados por la Iglesia y considerados, por consiguiente, dentro del canon de la Iglesia Católica, o sea, canónicos.
Las fuentes evangélicas
Pero, ¿cómo explicar a la vez las semejanzas y las divergencias que existen entre los tres Evangelios sinópticos en la forma en que hoy los conocemos? La teoría que goza de mayor aceptación es la de las Dos Fuentes. Elaborada hacia mediados del siglo pasado, hoy es aceptada por la gran mayoría de los exégetas, tanto católicos como protestantes. Una de las fuentes en cuestión es Marcos, de quien dependerían Mateo y Lucas en todos los relatos que tienen en común. Mateo y Lucas contienen también bastantes secciones, especialmente de los dichos de Cristo, desconocidos en Marcos.
Como, según la teoría de las Dos Fuentes estos dos Evangelios son independientes entre sí, habría que admitir que ambos se sirvieron de otra fuente, la denominada Q, que es la inicial de la palabra alemana Quelle, que significa fuente. En cuanto a las secciones propias, tanto de Mateo como de Lucas, provendrían de Fuentes secundarias que conocerían cada uno de ellos. Presentada de esta forma, la teoría de lasDos Fuentes se presta a una seria objeción. Mateo y Lucas ofrecen entre sí no pocas concordancias contra Marcos, tanto positivas como negativas, más o menos importantes.
Redacción de los evangelios sinópticos
La fecha de redacción de los Evangelios sinópticos es muy difícil de precisar ya que depende directamente de a solución que se acepte acerca del problema sinóptico.
En la hipótesis de la teoría de las Dos Fuentes la composición de Marcos se situaría un poco antes de la muerte de Pedro, según Clemente de Alejandría, o un poco después, de acuerdo a Ireneo de Lyon. Pedro falleció entre el año 64 y el 70, no después de esta fecha dado que no parece suponer que la destrucción de Jerusalén se haya consumado ya. Las obras de Mateo en griego y de Lucas serían posteriores a Pablo de Tarso, lo cual se confirmaría por el hecho de que, con toda probabilidad, Mateo y Lucas suponen que la ruina de Jerusalén es ya un hecho consumado (Mateo 22:7 y Lucas 19:42-44 y 21:20-24).
De acuerdo a lo anterior, su fecha estaría entonces entre el 75 y el 90, pero hay que reconocer también que este último argumento no es definitivo. Para una datación tardía del Evangelio de Mateo en griego sería más procedente tener en cuenta ciertos detalles que denotan una polémica contra el judaísmo rabínico salido de la asamblea de Yammia, la cual tuvo lugar por el año 80. Y si se admite que los Evangelios sinópticos fueron compuestos en etapas sucesivas, la datación de su última redacción deja abierta la posibilidad de fechas aún más antiguas para las redacciones intermedias, y con mayor razón para el Mateo en arameo, que estaría en el origen de la tradición sinóptica.
Por lo general, los exégetas bíblicos consideran que las fechas más aceptables de redacción son las siguientes:
• Evangelio de Marcos: 68 al 73
• Evangelio de Mateo: 75 al 90, a pesar de que algunas teorías lo sitúan antes del año 70.
• Evangelio de Lucas: 80 al 100, más concretamente alrededor del año 85.
• Evangelio de Juan: 90 al 110.
El propósito de los evangelistas fue más teológico y misionero que simplemente histórico. Los redactores evangélicos que después de ellos consignaron y reunieron sus testimonios, lo hicieron con el mismo afán de honesta objetividad que respeta las fuentes. Los Evangelios se distinguen de los modelos paganos por su seriedad ética, su finalidad religiosa y su convicción de la superioridad mesiánica de Jesús.
Los símbolos de los cuatro evangelistas
Tradicionalmente se suele representar a los cuatro evangelistas mediante los siguientes símbolos:
• Mateo: el ángel (un
...