Diferencias cibernetica primer y segundo orden

           La diferencia entre la cibernética de primer y segundo orden radica en la postura que el observador tiene respecto de su rol como tal. En la cibernética de primer orden, el observador pretende dar una visión “objetiva” desde afuera de la realidad sin tomar en cuenta a quien observa. Se preocupa de los procesos de autorregulación, mecanismos de retroalimentación (positiva o negativa) que se están dando dentro de un sistema para mantener su homeostasis y el cómo manejan la información con el mundo externo para lograr estos procesos mencionados, pero sin tomar en cuenta que este observador está influyendo o a su vez este puede tener una visión de la realidad que le es propia (Garibay, 2013). Ahora bien, en la cibernética de segundo orden se genera un cambio en la concepción de observador, aquí este se incorpora dentro del sistema dado que este se puede ver alterado por su presencia. En este sentido surge también otra diferencia la cual es que la cibernética de primer orden da demasiada importancia a la retroalimentación negativa, es decir, sistemas controlados que intentan mantener la estabilidad interna esforzándose por mantener sus objetivos. En cambio, la cibernética de segundo orden plantea la idea de unos sistemas más autónomos, y dándole más importancia a los procesos de diferenciación que se asocian a la retroalimentación positiva (Garibay, 2013).

            Desde el quehacer clínico esta evolución de una cibernética de primer a segundo orden cambia la manera en cómo se entiende la terapia dado que con la incorporación de la cibernética de segundo orden se tiene consciencia del hecho de que la presencia podría estar cambiando al sistema. Por ejemplo, la presencia de “observar” para el cliente o paciente, puede generar que no se comporten igual, y esto se aplica tanto para una familia como una comunidad. En este sentido, si un terapeuta se acerca a una familia, probablemente los niños intenten comportarse de una manera más serena, o los padres pueden actuar de una manera más mesurada teniendo en cuenta que están siendo observados. Además, dado lo mencionado anteriormente respecto a la diferencia entre la cibernética de primer y segundo orden su vez, se puede decir que el terapeuta dentro de esta concepción ya no se centra en plantearle a la familia que puntos deben modificar, sino que desde la incorporación de la cibernética de segundo orden el terapeuta consulta cuáles son sus metas y que desea modificar la propia familia en una construcción conjunta.

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