Impacto Etico

Con el uso de las nuevas tecnologías de la información, la distancia entre las personas se ha acortado, los mensajes son capaces de llegar lo mismo a una comunidad cercana que hasta el otro lado del mundo.

El marketing ha utilizado esto sin duda para su beneficio, con sociedades globalizadas su campo de acción crece, sus ventas y su posición económica, y es tanto el impacto que este tiene sobre las sociedades, que muchas de ellas se convierten en blanco fácil para ser bombardeados de ideas comerciales, de estereotipos, fomentando así el consumo de estos productos y a su vez el capitalismo, haciéndonos personas materiales.

Antes debemos de explicar en qué consiste el capitalismo, esto para tener una idea más clara antes de poder comprobar o rechazar la hipótesis generada previamente.

El capitalismo es un sistema socioeconómico que usa al capital (recursos) como herramientas de producción y normalmente se encuentra regida bajo acciones como la inversión y obtención de beneficios.

La característica principal del capitalismo es muy sencilla de definir: hay trabajo asalariado y hay dueños de los medios de producción.₁

En nuestra hipótesis, hemos planteado la premisa de que el capitalismo movido principalmente por medios de comunicación, moldea los sistemas de valores de las personas, sus actos, sus ideales, promueve estereotipos y como resultado de ello encontramos a una sociedad carente de valores.

Así como nos dice Luc boltanski en el nuevo espíritu del capitalismo la perdida de autenticidad se refiere esencialmente a una uniformización o, si se prefiere, a una pérdida de diferencia entre los seres, objetos o seres humanos.²

Esta pérdida derivada de la condena del maquinismo o de su corolario, la producción en masa. El déficit de diferencias alude prioritariamente a los objetos cuya proliferación inunda lo cotidiano: telas, muebles, objetos decorativos, coches, etc.

La estandarización de los objetos y de las funciones conduce a una estandarización similar de los usos y, por consiguiente, a los usuarios, cuya práctica termina sin necesidad de haber decidido o de haber sido consientes de ellos, masificándose, adoptando modelos sociales, mimetizándose.

Esta masificación de los seres humanos a través del consumo en tanto que usuarios se extiende con el desarrollo del marketing y la publicidad, quienes nos imponen día con día actitudes, modelos, actitudes que debemos de adoptar.

Personas más preocupadas por adquirir un producto que por crecer moralmente, sociedad con falta de valores que se dejan influenciar por las grandes corporaciones a quienes solo les interesa tener ingresos económicos que los ayuden a seguir su producción sin tener mayor preocupación por aquellos quienes se dirige.

Con el marketing y sus técnicas de persuasión para que compremos sus productos el hombre se desnaturaliza, sus deseos por ser alguien

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