Principios básicos en la ética de la tecnología

Principios básicos en la ética de la tecnología

La tecnología es una parte fundamental de nuestras vidas, desde hace más de 10 años. Pero la misma investigación para mejorar y crear nuevas tecnologías viene con un riesgo para nosotros, debido a que puede crear cosas buenas o malas.

Por consiguiente, los fabricantes de tecnología deben preocuparse por las consecuencias que pueden crear y sobre todo proteger datos personales, deben ser transparentes y nuestra privacidad debe ser su prioridad.

El autor Isacc Asimov, padre de la ciencia ficción moderna (la ciencia ficcion clásica era Julio Verne) en su gran repertorio de novelas y ensayos el explicaba los beneficios y riesgos del avance de la tecnología que nos espera en el futuro, por ejemplo, la creación y la evolución sistemática de las inteligencias artificiales en el mundo de la robótica, en un principio los robots y sus “tres leyes éticas” serán sirvientes de los humanos, pero con el tiempo ellos evolucionarán y querrán formar parte de nuestra sociedad y ser tratados como iguales, la obra de Asimov ha sido adaptada a cine en películas como “ Yo, robot” y “El hombre bicentenario”

Hay muchos descubrimientos y avances en la ciencia, como por ejemplo, la clonación, el aborto, energía nuclear, etc. que son avances científicos muy importantes pero debido a la ética y moral de cada individuo estos descrubimientos no son  en tu totalidad, gracias a la ciencia pudimos crear la energía nuclear pero el uso de esta puede ser utilizado para avances que nos beneficien o para utilizarla como arma de guerra y matar poblados enteros.

Algunos de los avances tecnológicos involucrados con la ética son: la bioetica y la ingeniería genética; los objetivos de estos avances deben solucionar problemas como: la reproducción asistida, transplante de órganos, suicidio asistido, eutanacia, interrupción del embarazo, organismos genéticamente modificados, clonación humana, manipulación genética humana, etc.

El desarrollo de las nuevas tecnologías es  importante y de una cuidadosa reflexión., los robots están asumiendo las tareas repetitivas que antes realizaban los trabajadores de la línea de producción. Podemos contar con que el uso de la IA para estas tareas se extenderá a muchas otras áreas. Esto significa que tenemos que pensar en cómo desarrollar una sociedad con menor necesidad de trabajo humano, pero que capte los beneficios de la productividad y los transfiera a las personas –quizás mediante algún modelo de renta básica universal– de una manera que satisfaga su necesidad de sentir un propósito. Este será un reto muy difícil.

Algunos observadores creen que el desarrollo de máquinas superinteligentes, significativamente más inteligentes que los humanos, es inminente. ¿Qué significará eso para el futuro de la humanidad? ¿Decidirán estas máquinas superinteligentes que están mejor sin nosotros? Esa alarmante perspectiva sería una tragedia de proporciones inimaginables que pondría fin a miles de millones de años de existencia en el planeta y la pérdida de todo el potencial de las futuras generaciones de seres humanos. ¿Deberíamos, entonces, centrarnos en reducir, en la medida de lo posible, el riesgo de extinción humana? ¿O tendrían estas máquinas superinteligentes –si estuvieran dotadas de conciencia– un valor intrínseco, equivalente o incluso superior al nuestro? La mayoría rechazará esa sugerencia; pero quizás tengamos una inclinación innata a favor de nuestra propia especie. Ciertamente tenemos que reflexionar más sobre esta perspectiva.

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