¡SOLDADOS DE TIERRA, MAR Y AIRE!

¡SOLDADOS DE TIERRA, MAR Y AIRE!

INTRODUCCIÓN

En los momentos difíciles de historia patria siempre se ha recurrido a hombres que llenos de firmeza, honor, dedicación y compromiso, anteponen su seguridad e integridad para el cumplimiento de la misión institucional y nacional; esta es la razón primordial que tienen las Fuerzas Militares en el Estado. Estos individuos son  todos los soldados e infantes de marina quienes día a día realizan labores para garantizar la paz y la seguridad de nuestro país. Individuos llenos de coraje, pasión y lealtad por su patria, que sin dudar un segundo darían su vida por la soberanía y tranquilidad de sus compatriotas, por eso la carrera militar "es también una profesión, porque el vínculo se establece mediante un compromiso. Por eso imprime carácter" (Pardo, 2013)

Los ciudadanos hoy en día reconocen y valoran de gran forma el esfuerzo sobre humano realizado por nuestros hombres, quienes con gran sacrificio y anteponiendo a sus familias u hogares luchan para llevar a todo el territorio independencia, seguridad y libertad, los éxitos en las labores realizadas siempre llevan  consigo transparencia, eficiencia y efectividad y ante  todo respeto por cada ser humano con el que tienen la oportunidad de encontrarse, respetando de esta manera los Derechos Humanos y  las bases del Derecho Internacional Humanitario. Los soldados e infantes cumplen la misión más noble de todas que es la defensa de la democracia y la población civil, es por eso que los soldados de tierra, mar y aire renuevan esfuerzos en la consolidación de la seguridad nacional, siempre con acciones correctas según la situación

DISCUSIÓN

Estos hombres y mujeres que a diario arriesgan su vida, tiene  como recompensa la satisfacción personal de haber dado lo mejor de si, con cada paso dado, con  cada grito, con cada gota de sudor, pero otro factor que recompensa la labor de estos soldados es la de el reconocimiento de todos los ciudadanos y el respeto de cada individuo que entienda la labor.

"El soldado es ese ciudadano que se presta, se echa a sus espaldas, asume como deber una necesidad que toda sociedad humana tiene: la defensa. Mientras el resto de la ciudadanía labora en sus diversas actividades: cultura, economía, ciencia, industria, etc., el soldado se prepara, se entrena, vigila…para que esa comunidad a la que pertenece tenga garantizada la paz; bien supremo y aspiración de toda sociedad a cuya pérdida se puede aplicar por encima de cualquier otro bien eso de que sólo se sabe el valor de las cosas cuando se pierden. Démonos una vuelta por el mundo para comprobarlo." (Conde, 2016)

Detrás de cada uno de estos héroes hay muchas personas que le brindan apoyo incondicional,  a diario los familiares de estos héroes se encuentran en una angustia constante que los invade, pero aun más importante se debe preguntar ¿qué siente un soldado o infante a diario lejos de sus seres queridos y familiares? Y la respuesta es muy sencilla es una tristeza inmensa que se calma  por el sentimiento del deber cumplido, el cual llena de orgullo el corazón de cada uno de los combatientes que ponen su pecho ante los peligros surgidos de la sociedad.

De esta manera, los héroes de patria deben tener una vocación muy alta, por lo tanto entendemos a la vocación militar como actos que nos conducen a un compromiso ineludible con la causa de nuestra institución, siendo además, una relación entre el trabajo, la afición y la aptitud, pero no debemos confundir a la vocación con el deseo o anhelo.

"La vocación militar, consecuentemente, es la llamada a una profesión plena de sacrificios y total dedicación, Exige los valores ya citados, inexcusables para afrontar una vida dura y sin grandes compensaciones materiales. Hoy se ve escasamente favorecida para que en los jóvenes brote ese entusiasmo que les haga acudir al llamamiento del servicio de las armas, por la actual materialización de los esquemas de la vida moderna que se contraponen a la austeridad y rigidez que entraña esta profesión" (Pardo, 2013)

Hoy el materialismo presiona negativamente sobre la vocación y la reforma. Existen tendencias hacia una ventaja material que puede no Ilegarse a obtener en la profesión a la que el joven se siente llamado. Esto hace que, muchos, cambien sus inclinaciones hacia otros caminos. El sentimiento nacional, o amor patrio, es el que produce en la juventud, el más fuerte tirón hacia el servicio de las armas. Servicio que exige un gran sacrificio, por las circunstancias que lo rodean, entre ellas, la absoluta dedicación, entrega y los cambios de lugar, son ya hechos que imponen unos condicionantes, no sólo para el militar, sino, igual, para la familia; con los graves trastornos que estas variaciones producen en el entorno de vida

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