ÉTICA Y TECNOLOGÍA, ARMA DE DOBLE FILO

Para poder sumergirnos en el “amplio mar” de tecnología y ética, y su estrecha relación, lo más correcto y coherente es conocer los conceptos fundamentales que van a permitir darnos un bosquejo de todo lo relacionado a estas dos palabras que iremos desenvolviendo, desarrollando, y entrelazando, en breve. Llamamos tecnología al “conjunto ordenado de conocimientos y los correspondientes procesos, que tienen como objetivo la producción de bienes servicios, teniendo en cuenta la técnica, la ciencia y los aspectos económicos, sociales y culturales involucrados.”, Aquiles Gay. Por otro lado, definimos la palabra ética como “el comportamiento, conducta y el actuar del hombre frente a la sociedad”, Martin Gak.

Desde tiempos inmemorables, la humanidad siempre ha buscado desarrollar herramientas, a partir de conocimientos científicos y empíricos, que le permitan sobrellevar la vida de una cómoda manera, es decir mejorar su calidad de vida. La tecnología como tal, data de los siglos XVIII y principios del XIX, con la llegada de la famosa “Revolución industrial”. A partir de este periodo, el hombre explota sus conocimientos científicos, entretejiéndolo con las técnicas, para crear artefactos que hacen la vida del hombre mucho más llevadera. Por ejemplo, la invención del termómetro de mercurio, inventado por el alemán Daniel Gabriel Fahrenheit; la máquina de tejer, inventada por el británico Richard Arkwright; el primer automóvil, inventado por Nicholas Joseph Cugnot, Francés; barco de vapor, inventada por el estadounidense John Fitch; entre otros cientos de inventos que dieron lugar al comienzo de una interminable era, marcada por la tecnología.

Hoy en día podemos observar que la tecnología ha invadido la sociedad, la educación, la política, las masas en general; que han concedido mejorar, indiscutiblemente, la eficacia de la vida. Al parecer ha invadido el mundo completo, como un “virus” imparable que nos hace dependiente de ella, y que se reproduce en nuestro medio, “asfixiándonos” debido a su rápida evolución. Dicho “virus”, se ha vuelto necesario en la vida cotidiana, ha conquistado, incluso, nuestros hogares. Si por un momento miráramos alrededor de nuestra casa, notablemente percibiríamos los innumerables artefactos tecnológicos que nos rodean: televisores, licuadoras, ventiladores, computadoras, celulares, neveras, aires acondicionados, entre otros.

Hasta aquí, podríamos decir que la tecnología es indispensable para la vida, y que es buena. Lamentablemente, debo decir que esto depende del uso que le de cada quién. Algunos lo usan para matar, otros para dar vida; unos lo utilizan para plantar, otros para desarraigar; unos para construir, otros para destruir; unos para hacer justicia, y otros para corrupción, etc. Desafortunadamente, estamos ante una sociedad llena de pensamientos perversos, corrompidos, inmorales, y faltos de ética que causan perjuicio a muchos en el planeta, y dando beneficio a unos pocos.

Los gobiernos de todo el mundo, siempre han querido manipular las masas, se presentan como ovejas delante del pueblo, de los ciudadanos; pero por detrás son lobos rapaces, no tienen ética, son ladrones profesionales de los recursos de las sociedades. El dinero, es la herramienta utilizada por el estado para tener acceso a incontables beneficios, entre ellos la manipulación de la muchedumbre a través de

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