33 PASOS PARA RECLAMAR TU PODER INTERIOR
Enviado por PaulinaEspinosa • 20 de Septiembre de 2012 • 48.450 Palabras (194 Páginas) • 589 Visitas
33 pasos para reclamar tu poder interior
33 PASOS PARA RECLAMAR TU PODER INTERIOR
LEY DEL DAR
“El universo opera por medio de un intercambio dinámico… Dar y recibir son aspectos diferentes del flujo de la energía del Universo.
Si estamos dispuestos a dar aquello que buscamos, mantendremos la abundancia del Universo circulando en nuestra vida.”
En realidad, practicar la ley del dar es muy sencillo:
Si deseamos alegría, démosle alegría a otros; Si deseamos amor, aprendamos a dar amor; Si deseamos atención y aprecio, aprendamos a prestar atención y a apreciar a los demás; Si deseamos riqueza material, ayudemos a otros a conseguir esa riqueza.
En realidad, la manera más fácil de obtener lo que deseamos, es ayudar a los demás a conseguir lo que ellos desean. Este principio funciona igualmente bien para las personas, las empresas, las sociedades y las naciones.
Si deseamos recibir el beneficio de todas las cosas buenas de la vida, aprendamos a desearle en silencio a todo el mundo, todas las cosas buenas de la vida.
“Todo lo que damos regresa a nosotros” y es verdad. Intentemos hoy dar algo positivo a quienes nos rodean y veremos los resultados.
Se habla del efecto boomerang, del dar para recibir. Todos comprendemos el mensaje pero eso no alcanza. Es necesario practicar, cambiar, transmutar. ¿Cómo? Tenemos que aprender sobre todo a cambiar decretos, a imaginar de una manera diferente, a potenciar las buenas energías que yacen en cada uno de nosotros.
“Actúa y piensa siempre sobre tus milagro como si ya tuvieras las condiciones que deseas.
Debes estar abierto a las incitaciones internas emitidas por la fuente de poder ilimitada cuando te da instrucciones sobre las formas de conseguir lo que deseas. Date cuenta que la ley Universal tiene que hacer la entrega en el plano físico, donde puedas utilizarla. El deseo de tu corazón puede venir de cualquier parte, de modo que no limites tu campo de expectación. Mantente abierto y flexible en todo momento.
Sonríe mucho: ¡El primer Milagro está en camino!”
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“33 pasos para reclamar tu poder interior”
PASO 1: YO SOY DIOS
El primero de los 33 pasos se llama Yo soy dios.
Puede que te estés preguntando ¿Quién se cree que es este bobo diciendo “yo soy Dios”? Lo que quiero decir es que tienes que aceptar la idea de que la Fuerza de Dios está en tu interior.
Obviamente, si la Fuerza de Dios está en todos los sitios, debe estar dentro de tí. Pero la mayoría de la gente no tiene ni idea de qué significa “Dios” o lo externalizan creando un Dios fuera de sí mismos. Al usar el intelecto para comprender a Dios, proyectan la idea en el exterior. Así, dicen: “Esta persona es Dios, esas ideas son Dios, el dinero es Dios, el glamour es Dios”, o cualquier otra cosa.
La Fuerza de Dios está dentro. Internaliza y acepta que está fluyendo a través de tí. Cuando percibes a Dios como una fuerza fuera de tí, no puedes usar su energía apropiadamente. Una vez que interiorices la fuerza y deje de ser un vago concepto intelectual, entonces puedes avanzar hacia sentirla realmente dentro de tí. En este punto, un asombroso poder de percepción y bondad penetrará en tu vida.
Hay un método guiado para este viaje nuestro; no es tan improvisado como la mayoría piensa. Yo creo que el “tú infinito”, que es la morada de más alta energía dentro de tu ser, tenía una vision de lo que te iba a ocurrir en esta vida. No creo que vinieras aquí por accidente, que simplemente te dejaras caer dentro de un pañal y pensaras: ¿Qué diablos hago aquí?. Creo que tu evolución aquí en el plano terrestre es tan poderosa y sagrada, tan espiritualmente dinámica y especial, que el infinito dentro de tí tenía un plan.(……)
Tu primer punto de poder es abrazar el concepto de “Yo soy Dios”. A primera vista, la idea parece egoísta. Pero no estás acogiendo esta idea para hablar de ella, ni para mostrarla y conseguir admiración por tus cualidades divinas. Estás interiorizando la idea silenciosamente, aceptando que la fuerza de Dios está en tí como un sentimiento espiritual. (……..)
Si acostumbrabas a tener un concepto de Dios fuera de tí mismo, entonces invita a Dios a casa. Permitirlo traerá un enorme poder a tu corazón. Incluso puede que no lo sientas aún, pero por lo menos puedes imaginarlo, visualizarlo ahí.
Esta idea no trasciende ninguna fe. Puedes aún ser un buen cristiano y creer en Jesucristo y a la vez en una energía crística en tu interior, más que fuera de tí. Un concepto intelectual de Dios fuera de tí te merma poder, porque lo que estás diciendo es, “No tengo poder sobre mi destino”. Esto significa que no cres que puedas crear energía y hacer diferencias. No puedes entrar en acción y orientar y cambiar tu destino. No puedes creer en prosperidad, actuar enérgica y sabiamente, y conseguir más dinero…
El segundo movimiento en este proceso es respetar el punto de evolución en que te encuentras, lo que significa aceptar el lugar en que estás. Luchar contra las circunstancias o quejarse de ellas, diciendo que no eres tan privilegiado como los demás, disgustarte porque no tienes toda la fuerza física o el conocimiento que necesitarías, todo eso es un malgasto de energía y una falta de respeto a tu yo espiritual.es algo sin propósito, autoindulgente y débil.
Si te vas a convertir en un guerrero espiritual y a honrar la fuerza divina en tí, estarás de acuerdo en aceptar las circunstancias tal y como te las encuentras, recordando por supuesto, que casi todo puede mejorarse y que las cosas cambian. Lo que no puedas cambiar, probablemente no necesitas cambiarlo. Puedes simplemente ir más allá de preocuparte por ello.
Dí “el infinito dentro de mí, esa parte mía que es Dios, ama y respeta esta evolución humana mía. ama y respeta donde me encuentro y mis actuales circunstancias, así que yo haré lo mismo, incluso si mis circunstancias no son las mejores. Todo esto es parte de mi evolución. Puedo trascenderlo e ir más allá.”(……)
Si estás rodeado de un grupo de gente negativa y desagradable, a veces llamados parientes, o quizás amigos, o compañeros de trabajo, o lo que quiera que sean, mejor que luchar contra esa fealdad alrededor de tí y verla como una desgracia, ámala. Mira a la gente, al trabajo, a tus circunstancias, la familia, la tribu, tu casa, y dí, “Gracias , Dios, gracias por enviarme estos maestros. Ellos me están volviendo loco, me están enseñando a no reaccionar. Me fortalecen enseñándome a transmutar las energías negativas en positivas. Usando a estas gentes, convertiré mi enfado, odio y reacción en , por lo menos, una energía neutral, de
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