ACCIÓN DEL GOBIERNO EN EL MERCADO DE LA VIVIENDA

Uno de los principales argumentos que expone el modelo económico capitalista es la no intervención en el libre mercado pero principalmente que el gobierno no intervenga en los ajustes naturales que tienen los mercados en la oferta y la demanda, es por eso que en este tema explicaremos los efectos que tendría en el mercado de la vivienda y los topes a los alquileres, si el gobierno llevara a cabo acciones de intervención.

El mercado de la vivienda sobretodo en los últimos años es uno de los que más importancia ha adquirido principalmente en las ciudades grandes, ha tenido un espectacular crecimiento de los precios y de los niveles de endeudamiento, debido a los créditos que las familias han adquirido para financiar la compra de los mismos. Sin embargo a pesar de los intentos de las autoridades de alertar a las familias sobre posibles subidas de los tipos de interés futuros no ha habido un freno suficiente de la demanda, por lo que encontramos que generalmente las familias pagan un alto porcentaje de su sueldo para cubrir sus necesidades de vivienda.

A pesar de la crisis inmobiliaria que se vivió hace unos años, los economistas argumentan que la intervención de los gobiernos en mercado de vivienda propiciaría escasez de vivienda, mayor actividad de búsqueda y la existencia de un mercado negro, todo esto propiciado por el establecimiento de precio tope por parte del gobierno.

Se parte del supuesto en que el gobierno interviniera en el mercado debido a que los consumidores lo presionaran para que se establecieran límites a los precios de los alquileres derivados de altos incrementos en el mercado de la vivienda. Esto ocasionaría que se fijara un precio tope o precio máximo, con lo que se regularía el precio mayor al que se pueden ofertar las viviendas.

El problema se originaría si el nivel del precio tope estuviera por debajo del precio de equilibrio del mercado, ya que al bajar el precio los ofertantes estarían dispuestos a ofrecer una cantidad menos de viviendas en el mercado, lo que ocasionaría que la demanda no fuera cubierta y se presentara una situación de escasez con lo que se tendría que determinar un método para asignar las escazas viviendas entre las personas que las demandas, dejando a cierta cantidad de personas sin acceso a una vivienda.

Aunado a la escasez se generaría un incremento en la actividad de búsqueda para conseguir una vivienda por lo que el costo de oportunidad de las viviendas se incrementaría al tener que dedicar mayor tiempo y recursos económicos a la búsqueda del bien, lo que trae como resultado el uso ineficiente de estos. Con lo anterior podemos decir que con la intervención más que controlar el precio, tendrían un efecto de alza de los precios. Lo que llevaría a que ofertantes y demandantes cayeran en un mercado ilegal o mejor conocido como mercado negro, en el cual dependiendo del nivel de restricción de los topes, los precios del mercado negro equivaldrían a los precios máximos reales que los consumidores estarían dispuestos a pagar.

Después de analizar los efectos de la intervención del gobierno en el mercado de la vivienda podemos concluir que el establecimiento de topes en los alquileres, ocasionan ineficiencia debido a la subproducción, así como injusticia e inequidad en el mercado y aunque la finalidad de la intervención es generar un beneficio y un resultado justo. Al cabo de un tiempo termina perjudicando a compradores y vendedores, ya que bloquea el intercambio voluntario, no resuelve el problema de escasez, no logra que se asignen equitativamente las viviendas escasas entre los compradores.

Para entender un poco más el funcionamiento del mercado de la vivienda y los alquileres es necesario estudiar el comportamiento de la elasticidad de la oferta y la demanda del mismo.

Elasticidad de la demanda en el mercado de la vivienda

La demanda de vivienda de una familia depende de la edad y de la situación del cabeza de familia que toma la decisión de compra. Una manera de analizarla consiste en relacionar el número de habitaciones por vivienda para cada tipo de cabeza de familia (la cantidad demandada) con una estimación del precio de una habitación adicional y con la renta tradicional del hogar (en Estados Unidos los precios de las habitaciones son variables debido a las diferencias entre los costos de construcción).

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