Alcholismo En La Juventud

EL ALCOHOLISMO EN MENORES DE EDAD EN LA COMUNIDAD DE SATEVO

Marco teórico.

La existencia de una gran variedad de bebidas alcohólicas ha permitido la satisfacción de gustos individuales y que su consumo, por lo menos ocasional, sea una costumbre social muy definida entre diferentes poblaciones.

Según la enciclopedia Encarta 2008, una bebida alcohólica es cualquier líquido con cierta cantidad de alcohol etílico, producida ya sea por destilación o mediante mezclas fermentadas.

El termino alcoholismo fue acuñado originariamente por Magnus Huss en 1849. Hasta 1940 fue utilizado para referirse a las consecuencias psíquicas del consumo elevado al alcohol de larga evolución. (Curnillera, 2006)

El alcohol es un liquido incoloro, de sabor urente y olor fuerte, que arde fácilmente dando una llama azulada y poco luminosa. Se obtiene por destilación de productos de fermentación de sustancias azucaradas o feculadas, como uva, melaza, remolacha, patata. Forma parte de muchas bebidas como vino, aguardiente, cerveza, etc. (Fernandez, 2006)

1.1 Circulo vicioso

Aproximadamente una de cada diez personas que ingieren bebidas alcohólicas queda tan constantemente “beneficiada” por la experiencia que poco a poco cae en la dependencia de la droga llamada alcohol. La dependencia hace que repita el beber “beneficio” y el beber intensifica la dependencia. De ese modo queda establecido un circulo vicioso que involucra el acto de beber, la reacción benéfica del alcoholismo a ese acto, la dependencia que gradualmente se desarrolla como consecuencia de los beneficios repetidamente obtenidos y mas el beber continuado y los problemas causados por la dependencia creciente. (Lazo, 2004)

1.2 Consecuencias.

El beber del alcohólico y sus secuelas es lo que lleva a los conflictos de personalidad, a los problemas psicológicos, a las frustraciones y a las dificultades socioeconómicas. Es decir, estos últimos son la consecuencia del alcoholismo, y no la causa. (Lazo, 2004)

El abuso de alcohol y otras drogas en la adolescencia dañan más fácilmente el cerebro y el sistema inmunológico (Fernandez, 2006)

1.3 Frecuencia con la que los jóvenes beben.

El problema empieza temprano y, si no lo llevamos cuidado, puede tener efectos de largo alcance.

El problema de la bebida aumenta del 5 por ciento en varones de 14 años al 40 por ciento en los de 19, y del 4 por ciento en las muchachas de 14 años al 21 por ciento en las de 19. (North & Orange, 1996).

1.4 Delito, enfermedad mental y suicidio.

El efecto que ejerce el alcohol sobre el dominio de un individuo sobre sí mismo puede ser devastador. Los adolescentes que abusan del alcohol, a menudo se vuelves “otros” bajo su influencia.

1. Los estudios han demostrado que cuando los bebedores sociales varones beben en un grupo con compañeros o amigos, las agresiones interpersonales aumentan de modo significativo.

2. De todos los arrestos efectuados por la policía, más del 50 por ciento están relacionados con el alcohol.

3. El alcohol es un factor contribuyente en más del 50 por ciento de los homicidios.

4. De todos los ingresados en hospitales mentales, más de la mitad son alcohólicos.

5. Más de un tercio de los suicidios involucran alcohol, y un número desproporcionadamente alto de personas con problemas de bebida, se matan. (North & Orange, 1996)

1.5 ¿Por qué beben los adolescentes?

Un investigador señala que muchos de los jóvenes que beben en abundancia tienen padres que decididamente desaprueban su comportamiento aunque no prediquen con el ejemplo.

Buena parte del hábito de beber de los adolescentes es resultado de un deseo de lograr aceptación de sus compañeros. (North & Orange, 1996)

Las motivaciones principales que tienen los adolescentes para el consumo lúdico son, principalmente, seguir justificando el derecho de divertirse. Pero, por el contrario, están surgiendo con bastante fuerza otras motivaciones que están relacionadas con la existencia de problemas personales y ciertas dificultades también relacionadas con el entorno. (Fernandez, 2006)

El alcohol etílico deprime el sistema nervioso central (SNC) de todo aquél que lo ingiere. El alcohol, al entrar en contacto con las células nerviosas del cerebro, rompe momentáneamente su equilibrio de estabilidad a favor de la excitación. Esto desinhibe la conducta produciendo en la persona un sentimiento de bienestar, poder y excitación; si continúa bebiendo más de lo que el organismo metaboliza, el mecanismo se revierte y en SNC se deprime. (Fernandez, 2006)

1.6 ¿Dónde beben los adolescentes?

Cuando los adolescentes beben, usualmente lo hacen a escondidas y en una atmosfera de “Apresurémonos, para que no nos atrapen”.

Como resultado de esto, algunos jóvenes suelen ser ingeniosos en encontrar lugares para “ponerse alegres”. (North & Orange, 1996)

1.7 ¿A qué edad se consume alcohol?

A los 15 años de edad, 50% de los estudiantes ya había iniciado el consumo de alcohol o tabaco. Haber usado alcohol o tabaco previamente se asocia con mayores posibilidades de iniciar el uso de otras drogas. Aproximadamente 90% de quienes usaron alcohol o tabaco nunca inician el uso de otras sustancias; por otro lado, siete de cada 1 000 estudiantes inician directamente el uso de otras drogas sin que hubiesen consumido alcohol ni tabaco. En general, los varones, los estudiantes de preparatoria y universidad, aquellos de entre 19 y 21 años de edad, los que provienen del nivel socioeconómico alto y aquellos que viven en áreas urbanas, mostraron mayores posibilidades de iniciar el uso de todas las drogas estudiadas, comparados con las mujeres, los estudiantes de secundaria, aquellos de entre 11 y 14 años de edad, los que provienen del nivel socioeconómico bajo y los que viven en el área rural, respectivamente. (Herrera, Wagner, Velasco, & Borges, 2003)

En México el consumo de alcohol en estudiantes ha generado interés desde una óptica de salud pública por los problemas relacionados con su consumo. En población universitaria, los resultados de encuestas revelan que la proporción de bebedores de alcohol y los problemas asociados aumentan con la edad. En 1980, el consumo alguna vez en la vida en esta población fue de 86.4% y los problemas más frecuentemente reportados fueron: el deseo de beber menos (16%), los arrestos (9.8%) y los problemas familiares (5.6%).

De acuerdo con los datos más recientes reportados por la Encuesta Nacional de Adicciones (1998), particularmente en la población entre los 18 a 29 años de edad, que habita en la ciudad de México, 78.6% de los hombres encuestados es bebedor actual, mientras que en las mujeres la proporción

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