Análisis Sobre La Película PROFESOR LAZHAR‏

La historia se inicia con el fallecimiento repentino de una profesora de primaria, en un colegio de Montreal, Canadá, la cual se ahorca en su clase por varios problemas. Se abre una vacante que será difícil de cubrir en pleno curso escolar. En ese momento, aparece en la escena el señor Lazhar, el protagonista, un inmigrante de Argelia de mediana edad y buenos modales que se presenta a la directora como un profesor con experiencia en su país de origen, ofreciéndose para hacerse cargo de la clase. La directora, ante las dificultades para reemplazar a la docente fallecida, accede a contratarle, saltándose los trámites y resolviendo el problema producido con la docente fallecida.

La incorporación del profesor Lazhar al colegio pone en cuestión el sistema de enseñanza que tiene el colegio y provoca si querer críticas. El maestro recupera con amabilidad la disciplina de la clase, la figura del profesor dentro del aula. Gracias a la amabilidad del profesor, las relaciones con sus alumnos logran ser muy buenas y provocando que salgan las emociones sobre el suicidio de su querida maestra; a medida que avanza la historia, uno logra darse cuenta de que las emociones son un papel importante en el aprendizaje. La conducta que quiere crear el señor Lazhar resulta difícil de encajar en la sociedad actual, ya que obliga a tratar a los alumnos con mucho cuidado y precaución.

El ver esta película me ha invitado a reflexionar sobre la postura del profesor en el salón de clases. Este hombre se deja guiar por sí mismo y mejora su trabajo gracias a la superación personal y gracias a los alumnos, que se ve una gran mejora por parte de ellos gracias al profesor. Aquí vemos claramente que la capacidad de hacerse presente no es un don, la presencia es una habilidad que se adquiere y que es la tarea más primordial de un educador.

Lazhar se introduce en el conflicto de lleno, empeñándose en ayudar a sus alumnos que están entre los 10 y 11 años de edad y a superar el trauma del fallecimiento de su antigua profesora. En concreto ayuda a un alumno que se siente responsable del suceso, Simón es el arquetipo del niño problema del salón. Que molesta a otros, con pocos amigos y mal encarado con actitud desafiante hacia los demás. Una niña que está convencida de que lo es. Las buenas intenciones del educador, que conoce el dolor que se siente al perder los seres queridos, chocan con el silencio con el que los adultos creen proteger a los niños, frente a la muerte.

Hay una escena en la que una niña le da un abrazo a Lazhar y esta se da cuenta de que él lo necesita de verdad porque está pasando un mal momento en su vida igual que lo paso su maestra pero en el caso de la maestra, esta fue a pedir un abrazo a un alumno y este se lo rechazo, la profesora se sentía muy sola, no tenía el apoyo de sus alumnos.

Esta profesora al contrario que Lazhar, no encuentra apoyo en sus alumnos por algunos

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