Apuntes sobre la génesis de la política social.

Patricia González Patricia

Apuntes sobre la génesis de la política social.

Puede mencionarse como antecedente o principio de la política social aquellas medidas que en Inglaterra se han denominado “ley de pobres”, de las cuales puede mencionarse que se habían mantenido inalteradas desde finales del siglo XVI. Se remontan al periodo isabelino y consiste en delegar a la figura de la parroquia con funciones administrativas para aliviar la pobreza. Es menester mencionar que los recursos con los que se hacía frente al problema era a través de las aportaciones (una tasa de contribución) de los propietarios del lugar.

        Lo que se encuentra detrás de esta medida es el sentimiento moral de los ricos por aliviar la miseria de los pobres; ese era el pensamiento que reinaba en la época, las desigualdades de este tipo se resuelven a través de la caridad porque hay un orden divino que no puede ser alterado. A finales del siglo XVIII la industrialización propició un incremento demográfico, lo cual implicaba establecer contribuciones más grandes a los propietarios para poder hacer frente al gran número de personas que se encontraba en situación de pobreza.

        En 1975 se hizo una reforma a estas medidas, acordando incrementar los ingresos de las familias, además, se les otorgaría un suplemento en función del número de hijos que se tenía y en relación con el precio del pan, pero estas medidas y otras más que se implementaron no resolvieron el problema. El predominio cada vez mayor de las ideas liberales se mostraban incisivas ante estas medidas por considerarlas desviadoras de recursos (que podían usarse en actividades productivas), paternalistas, y por disminuir el interés de las personas por salir de la pobreza.

        Respecto al ámbito laboral puede mencionarse el caso alemán. En 1885 Bismark decreta la primera ley de compensación para trabajadores, es decir, se abandona el seguro de los patrones (en el cual, si había un accidente el obrero debía pagar los daños causados a la maquinaria) en favor de la compensación de los trabajadores, a diferencia de la primera, se remunera al trabajador lesionado. La intención de Bismark al promulgar esta ley era apartar a los obreros de los sindicatos.

La ley de 1883 contempla el seguro de enfermedad: cajas locales alimentadas en sus dos terceras partes por las cotizaciones de los asalariados, y en una tercera parte por las de los patronos, debían abonar durante las 13 primeras semanas de enfermedad, una indemnización al asalariado enfermo. La ley de 1885 sobre el seguro de accidentes obligaba a  crear una caja, cuya financiación corria a cargo de los patronos, para indemnizar en caso de accidente de trabajo, fuese quien fuese el responsable. Así, en caso de incapacidad laboral, la víctima percibía dos terceras partes de su salario y en caso de muerte la viuda recibía el 60% del salario de su marido. Por último, la ley de 1889 instituyó un seguro de jubilación: los trabajadores cuyo salario ere inferior a 2000 marcos tendían derecho a una pensión a los 70 años, abonada por una caja financiada por los asalariados, los patronos y el Estado. Estas leyes dotaban a Alemania de una legislación social que no existía en ningún otro país. Gracias a ella se acrecentó la seguridad del trabajo. Por no se ponía ninguna limitación a los poderes del patrón dentro de la empresa en lo referente a las condiciones del trabajo, la duración de la jornada laboral y el trabajo de mujeres y niños …^[1]

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