CARTA A MI VIDA

Querida vida:

    Llamarte bonita es aceptar que eres caprichosa. Sometida a la tiranía de tus caprichos y sabiendo que pocas cosas siguen una lógica consciente y racional, entenderás que vivirte no resulta nada fácil.

    Uno de los primeros puntos que tengo en desacuerdo contigo, es tu necesidad de hacerme sentir inmortal e invencible, como si estuviese en la cima de la montaña más alta, para luego recordarme de manera tan agridulce, que no eres para siempre, que en algún momento cuando menos lo espere…voy a caer de tus brazos hacia un vacio de misterios, hacia un túnel oscuro donde voy a tener que lidiar con la incertidumbre de saber donde se encuentra el final, supongo que solo tendré que buscar alguna luz, siempre hay una luz.

    Quiero una explicación lógica sobre el porqué es tan difícil lidiar con la perdida, hay personas que me haces conocer, para luego alejarlas de mi camino.  Lo peor es que lo haces sin anestesia, sin previo aviso, sin señales. En un abrir y cerrar de ojos se desvanecen, como una aparición, lo cual me hace pensar….será una prueba para hacerme más fuerte? Será un acto de tu hermano el destino? Será una dulce tortura con la que gozas cada vez que la vez suceder?. Existen tantas respuestas a esa pregunta como estrellas hay en el cielo.

    Siento que tienes diferentes roles. La primera de ellas es un titiritero, tomando el control de cada paso que doy, jalando de mis cuerdas, de cada fibra de mi alma, lo haces tan minuciosamente que no percibo como lo haces. Tratas de hacerme sentir en control cuando realmente gran parte de esa sensación es una ilusión. Hay días donde actúas como un mago, cada situación para ti es un nuevo truco, tratas de ponerme a prueba solo para demostrar que tan ágil soy, que tanto tardo en descubrir la solución a tu juego. Sin embargo, la mayor parte de mi tiempo contigo, actúas como un observador silencioso, yo soy tu película. Tú eres el director, por lo cual sabes de donde vengo, en donde estoy y hacia donde me dirijo.

  Para despedirme quiero aclarar algo, estoy agradecida por permitirme estar a tu lado, a pesar de que tenga tantas diferencias respecto a tu manera de hacer las cosas. Aprecio los momentos que me han dejado sin aliento, los sentimientos que han hecho que mi corazón se sienta en llamas y las sensaciones que me han obligado a suplicarte por más tiempo. Sinceramente te aprecio por el simple hecho de darme una oportunidad de permanecer en tus brazos.

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