CONTRATACION DE ADMINISTRACION PUBLICA

CONTRATACIÓN DE LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA

A través de los tiempos han surgidos diversas reglas, leyes, derechos y deberes que han permitido que el campo laboral sea una rama autónoma en donde pueda realizar técnicas propias de contratación. Estas evoluciones han permitido que un trabajador que presta sus servicios subordinadamente haya pasado de ser un esclavo en la Edad antigua, un siervo de la Edad Media (conocido también como el siervo de la gleba), a un sujeto con derechos y libertades en la actualidad. El Derecho ha venido a regular condiciones mínimas necesarias para una estabilidad social de estas personas contratadas.

Todo sistema de contratación debe estar regido por estándares que tipifiquen y apoyen los fines para los cuales se adopten, generando esto confianza y dinamismo en los procesos que se deben seguir para lograr objetivos esperados.

En Colombia, los procesos de contratación están reglamentados por la ley 80 de 1.993 y la ley 1150 de 2007, en donde se definen las modalidades sobre las cuales se debe realizar dicho proceso. Pero no es ajeno para nadie que también en Colombia, estos procesos han estado marcados por altos índices de corrupción y resultados poco eficaces que crean en la población, preocupación e inconformismo puesto que se están invirtiendo recursos (materiales, mano de obra, infraestructura, etc.) a los que se les está dando una subutilización con el objetivo de la obtención de beneficios individuales ante la creación de beneficios que ratifiquen el articulo primero de la Constitución Política en donde Colombia se reconoce como un Estado social de derecho en donde debe primar el interés general sobre el particular.

Una de las debilidades que más hace mella en el sistema de contratación en Colombia es la falta de regulación sobre la calidad del personal encargado de realizar la evaluación de las ofertas, así entonces estas evaluaciones se hacen de manera subjetiva y muchas veces con la participación de “palancas” o favores que promueven la selección con un bajo grado de objetividad; además es casi que inexistente el seguimiento de la ejecución y cumplimiento de los contratos en Colombia por lo que es común ver que muchas de las obras adjudicadas a contratistas no cumplan con las características inicialmente planteadas o simplemente no sean finiquitadas; también se destaca la poca accesibilidad a la información que se pueda tener acerca de los proyectos referenciados como contrataciones, puesto que hay entidades publicas que no hacen oficiales sus indicadores de gestión y no permiten que sus resultados sean sometidos a juicios externos, aportando así en gran medida a que se presenten situaciones de corrupción dentro de los mismos, convirtiéndose este tema en el mas sonado y el mas común es estos procesos.

Uno de los escándalos mas recientes que ha suscitado este tema ha sido el llamado “Carrusel de la Contratación”

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