CONTRIBUCIÓN DEL DISEÑO ORGANIZACIONAL EN LAS PYMES DEL SECTOR REAL
Enviado por sayi72 • 24 de Septiembre de 2012 • 1.580 Palabras (7 Páginas) • 614 Visitas
CONTRIBUCIÓN DEL DISEÑO ORGANIZACIONAL EN LAS PYMES DEL SECTOR REAL
Autores: Mauricio Arias, Leonardo Espita, Edwin Hernández,
Sandra Lombana, Danilo Suarez
RESUMEN
A las pymes del sector real les esperan grandes retos ante el nuevo paradigma económico que esta por acontecer en Colombia, será imperioso que como estrategia dispongan de un diseño organizacional coherente ante la vicisitud que se aproxima.
Palabras clave-Pymes, tratado de libre comercio, diseño organizacional, implementación.
El presente ensayo tiene como objeto presentar una descripción general del concepto de diseño organizacional y la relevancia que tiene esbozar, elegir e implementar el adecuado en las pymes del sector real, al mismo tiempo dar una mirada al estado actual de la pequeña y mediana empresa asentada en el país; por estos días el crecimiento de la economía colombiana es evidente en casi todos los renglones, no obstante el desempeño del sector manufacturero no evoluciona al mismo paso, situación que puede ser generada entre otros factores por un nivel menor de demanda interna y por un bajo volumen de exportaciones a nuestros principales socios comerciales, Estados Unidos, China, Brasil y Venezuela. A puertas de la entrada en vigencia del TLC el panorama que se avecina es de una tonalidad grisácea, según sus principales contradictores este acuerdo podría hacer desaparecer la industria metalmecánica, de confecciones, de calzado, entre otras debido a la competencia de productos importados, por consiguiente:
Se trata de un acuerdo entre sociedades, Estados y economías con grados de desarrollo muy desiguales, que implicará sin dudas afectaciones graves a varios sectores como la agricultura, la industria manufacturera, la producción de medicamentos, etc. Se trata de un TLC que tendrá pocos impactos en la generación de nuevas actividades productivas y de servicios en Colombia, y por el contrario, pone en riesgo de destrucción a un número considerable de empresas. En términos de empleo, el TLC no generará en cifras netas nuevos empleos. [1]
Como se puede ver no todo el mundo está de acuerdo con el tratado de libre comercio, pero es inevitable, hace parte de la llamada globalización y ésta ha llegado para quedarse, avanza a un ritmo desenfrenado que envolverá a la totalidad del globo terráqueo en donde Colombia no es la excepción. El reto, consiste en apropiar una serie de herramientas necesarias para hacerle frente con altos niveles de competitividad, para lograr de esta manera asumir un papel de primer nivel en el nuevo entorno internacional, tomar parte activa en él y no permanecer excluido ante la inminente apertura mundial. Sopesando lo anterior, es inevitable que el tratado de libre comercio afectará para bien o para mal al sector empresarial colombiano, al que pertenece un conglomerado de grandes, medianas y pequeñas empresas. Dicho tratado acarreará fastuosas oportunidades a las organizaciones con un prominente musculo financiero, pero ¿qué pasará con las pymes?
Es bien sabido que las pequeñas y medianas empresas, (pymes), para el caso colombiano constituyen la primera fuente generadora de empleo, y son de vital importancia para sustentar el sistema económico, jalonan el comercio y por ende contribuyen con la llamada responsabilidad social al ponerle cara a la pobreza;
Las MIPYME (micro, pequeñas y medianas empresas) juegan un rol clave en la economía Colombiana. "Representan el 96,4% del número de establecimientos en Colombia, aportan con el 63% del empleo nacional; con el 45% de la producción manufacturera, el 40% de los salarios y el 37% del valor agregado. Son más de 650.000 empresarios cotizando en el sistema de seguridad social, [2]
con el transcurrir de los años han ido progresando de una forma preponderante, pero pueden encontrar un obstáculo inzanjable ante los nuevos convenios comerciales; por una parte, puede verse mermada su capacidad para retener el mercado interno clave de su existencia; y por otro lado, ver limitado su potencial para competir internacionalmente, ya que para esto requerirían de cambios en su andamiaje empresarial. Las pequeñas y medianas organizaciones tendrían que afrontar tareas que van desde el robustecimiento de sus aparatajes corporativos, la implementación de estándares acordes a las exigencias internacionales, hasta la exploración de nuevos y mejores métodos que las lleven a obtener un mayor grado de competitividad a partir de la construcción y posterior transmisión de conocimiento inherente solo del mejor recurso humano.
Habitualmente todas las empresas inician siendo el producto del dispendioso trabajo de un soñador, un emprendedor, que tiene una idea a la que le imprime pasión y de la que espera le retribuya el esfuerzo empeñado. Con cierto grado de suerte la empresa empieza a despuntar y, si logra sobrepasar las primeras dificultades, el empresario comienza a reclutar más personal, a comprar más maquinaria, a extender su local, y de vez en cuando a abrir nuevas sucursales, etc., ahora llega el momento de empezar a administrar y delegar funciones. Éste es el estado decisivo para todas las empresas; es un punto de no retorno, pues la compañía crece y prospera o sencillamente decae y expira. Nada de esto sería viable sin un diseño organizacional que se ajuste a este nuevo
...