Cada Niño Es Especial

CADA NIÑO ES EPECIAL

En la película cada niño es especial su protagonista Ishan, padece de un problema de dislexia, el cual es juzgado por sus compañeros, familia y profesores ya que no entienden su discapacidad. El comportamiento del niño, es totalmente diferente de los demás compañeros y hasta de su propio hermano, se puede observar que su temperamento es pasivo, pero que en algunos momentos se torna un tanto agresivo, pero no es porque él quiera, al contrario, esta actitud es provocada por sus amigos quienes no lo miran como a un niño normal siempre lo están rechazando y maltratándolo física y psicológicamente. Quizá, ellos al igual que hisan lo hacen de manera involuntaria puesto que estos comportamientos son observados en los profesores quienes en lugar de mirar el problema, se ensañan con él, es así como le manifiestan que no es un niño capas y que a toda hora esta en problemas.

Sin embargo, al llevarlo sus padres a un internado ellos piensan que es lo mejor. Es decir, que en este centro ishan va a recuperarse. Al contrario de lo que ellos esperaban el estado del niño empeora, debido a que nuevamente encuentra a docentes que lo único que les interesa es el prestigio de colegio como tal, sin importar los sentimientos, las capacidades y las diferencias que puedan llegar a tener cualquiera de ellos.

´´El maestro de hoy, enseña a vivir juntos: propicia situaciones para que haya encuentros diferentes y se vivan valores como la solidaridad, el respeto, el compartir. Para ello, empieza por reconocer sus estereotipos respecto, por ejemplo, de que la capacidad para aprender está en relación directa con el estrato sociocultural de aprendiz. Ya que para él todos son capaces de aprender´´1.

Ahora bien, si bien es cierto que existen maestros de esta índole, no podemos negar que hay docentes que en verdad tienen la capacidad de detectar cualquier clase de situación anormal que pase con sus niños que tiene a cargo, es el caso del profesor de artística que llega a crear otro ambiente más ameno, de confianza, de solidaridad de compañerismo. Todas estas actitudes hacen que el pensamiento y el comportamiento de nuestro pequeño protagonista le devuelvan la confianza y explore todas sus capacidades y valores que hay en él. Por cierto, la capacidad de perdón es el más relevante, más aún al mirar que sus padres en algún momento quisieron tapar con un dedo el inconveniente que ishan presentaba.

Como maestros en formación, toda esta serie de reflexiones nos enriquecen de alguna manera para concientizarnos que no solo trabajemos por un sueldo, o por tener un trabajo estable; la labor de docente va más allá de cualquier interés económico. Si bien es cierto, el dinero es necesario pero la parte humana lo es más.

1. EL maestro de hoy, Adriana Díaz, EL TIEMPO.

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