Caperucita Roja
Enviado por dany3018 • 12 de Octubre de 2013 • 730 Palabras (3 Páginas) • 228 Visitas
gente, cree que va a encontrar más comida
Caperucita: Adiós, abuelita.
La abuelita se marcha por el bosque. Baja la intensidad de la luz para indicar que anochece
ESCENA SEGUNDA
Aumenta la luz para señalar el amanecer. Caperucita —ya lleva puesta la capa— y su mamá están en su casa. La abuelita en la suya, metida en la cama. En el bosque, el lobo.
Lobo: ¡Vaya idea mala tuve con irme a la ciudad! ¡Todo está lleno de coches! ¡De milagro no me mató un autobús! La ciudad no es para mí. Menos mal que ya estoy otra vez en el bosque. Voy a descansar un rato y luego buscará a alguien para desayunar.
Se esconde entre los árboles
Mamá: ¡Caperucita! Acaba de llamar la abuelita. Está un poco enferma y se ha quedado en la cama, así que acércate a su casa y llévale esta cestita con un pastel y un tarrito de miel.
Caperucita: Pero mamá,. Si lo que tendrá será una indigestión por la tarta. ¿No será mejor que le prepares una manzanilla?
Mamá: No me gusta que seas tan sabihonda y tan repipi. Harás lo que te digo.
Caperucita: Bueno. Tampoco es para que me regañes.
Mamá: ¡Ah! Aunque se ha ido el lobo, ten mucho cuidado y no te entretengas. Yo, mientras, voy un rato a charlar con las vecinas.
La mamá se marcha por la derecha. Caperucita sale al bosque. Da vueltas por el escenario. Se agacha como si cogiera flores. Se sienta a escuchar el canto de los pájaros. Se tumba en el suelo. Se levanta. Salta. Todo al ritmo de la música
Conejitos: ¿Dónde vas Caperucita, tan de mañana con una capita de lana?
Caperucita: A casa de mi abuelita, a llevarle este pastel y este tarrito de miel.
El lobo, sin que le vean, se asoma entre los árboles
Lobo: ¡Qué suerte! Una niña ¡Qué tierna debe de estar!
Se oculta de nuevo
Árboles: ¡Caperucita! ¡Caperucita! ¿Estás perdida? ¿Qué buscas?
Caperucita: Voy a casa de mi abuelita. Le llevo un pastel y un tarrito de miel.
Árboles: Sigue ese camino y ten mucho cuidado
Vuelve a asomarse el lobo
Lobo: Se me hace la boca agua. Pero si me la como aquí, seguro que algún chivato le lleva el cuento a su madre y me busca un lío.
Se esconde
Pajaritos: ¡Oh, linda niña! Hace una hermosa mañana
Caperucita: Sí. Brilla el sol entre nubes de algodón.
Se asoma el lobo
Lobo: Pues sí que es cursi la pobre. En fin, la voy a engañar par comérmela tranquilamente en casa de su abuela. Allí nadie me molestará.
El lobo sale al encuentro de Caperucita
Caperucita: ¡Buenos días, señor!
...