Capital De Trabajo

Capital de trabajo

Las decisiones relativas al manejo de las finanzas se dividen en administración de activos y administración de pasivos, a largo y corto plazo. Una empresa no puede maximizar su valor a largo plazo a no ser que sobreviva a corto plazo.

La razón principal que explica por qué fracasan las empresas es que no son capaces de satisfacer sus necesidades de capital de trabajo. La buena administración del capital de trabajo es un requisito para la supervivencia de la empresa.

El término capital de trabajo, suele referirse a los activos circulantes. Es la inversión de una empresa en activos a corto plazo: efectivo, valores negociables, inventarios y cuentas por cobrar.

El capital de trabajo neto se define como los activos circulantes menos los pasivos circulantes.

La política del capital de trabajo se refiere a las políticas básicas de la empresa en cuento a los niveles que se requieren de cada categoría de activos circulantes y las formas en que se financiaran los activos.

ADMINISTRACION DEL EFECTIVO

La cantidad relativa invertida en activos a corto plazo está en función de las decisiones que se toman acerca de la administración del efectivo y los valores negociables, la cuentas por cobrar y los inventarios. De estos tres activos, el efectivo y los valores negociables son los que implican menos riegos.

La administración de los flujos de efectivo es una tarea importante para un director de finanzas y parte de ella consiste en determinar cuánto efectivo deber tener disponible una empresa en un momento determinado para garantizar que sus operaciones de negocios normales continúen sin interrupciones.

El término efectivo se refiere a los fondos que una empresa conserva y que puede utilizar para su desembolso de inmediato. La meta del gerente de efectivo es reducir al mínimo el monto del mismo que la empresa deber conservar para usarlo cuando lleva a cabo sus actividades de negocios normales y al mismo tiempo, debe contar con efectivo suficiente para pagar a los proveedores, mantener la calificación de crédito de la empresa y satisfacer las necesidades inesperadas de efectivo.

Las empresas en general conservan efectivo para las siguientes razones:

1. Saldo de transacciones: salgo de efectivo necesario para las operaciones diarias; el saldo asociado a los pagos y la cobranza de rutina.

2. Saldo compensador: saldo mínimo en la cuenta de cheques que una empresa debe mantener en un banco para solventar los costos de servicios como la compensación de cheques y la asesoría de administración del efectivo.

3. Saldo preventivo: saldo de efectivo que se mantiene en reserva para las fluctuaciones de los flujos de efectivo.

4. Saldo especulativo: saldo de efectivo que la empresa mantiene para aprovechar cualquier compra de oportunidad que pudiera surgir.

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