Competencia Didáctica

Ensayo: Tres dimensiones de la competencia didáctica

Todas las personas poseen un concepto de lo que debería o cómo debería ser el profesor para ser considerado competente; en primer lugar el profesor debe manejar un adecuado lenguaje hacia los alumnos, dándose entender al nivel de ellos, pero sin caer en errores, ya que si él los comete muy probablemente sus alumnos los cometerán, un aspecto muy importante dentro del lenguaje es la comunicación que el profesor tenga con el grupo, ya que será por medio de ella como se podrá tener un acercamiento a los alumnos, que por siguiente definirá la relación que haya entre alumno-profesor.

En segundo término, el profesor deberá actuar, es decir, no basta con que se llene la cabeza del alumno con información, él tiene y necesita ver en el profesor el ejemplo más claro de lo que se le está impartiendo.

Y en tercer lugar, la experiencia que el profesor tenga y demuestre a sus alumnos será decisiva en las acciones que ellos realicen; por ejemplo, si el profesor no tiene el hábito de escribir, y por lo tanto no es bueno haciéndolo, ¿cómo pretende que sus alumnos adquieran las habilidades de la escritura?, es por ello que el profesor debe cuidar hasta el más mínimo aspecto de sus acciones y saberes, pues como ya se mencionó, él es el ejemplo a seguir de sus alumnos.

En todo lo anteriormente mencionado, la competencia didáctica se hace visible, ya que sin un saber estructurado y adquirido, lleno de contenido, no puede llamarse de tal forma, al igual que un profesor sin un saber adquirido no puede llamarse competente.

En cuanto al contenido, se debe basar en los medios, ya que son éstos los que propician la formación de experiencias en los alumnos, y su vez, esas experiencias siempre llevan consigo un contenido, dicho en otras palabras, todas las acciones que el alumno realice en el medio en que se desenvuelve, le dejará un aprendizaje, que estará relacionado con algún contenido impartido por el profesor en la escuela, y es así como el alumno irá construyendo sus propios aprendizajes a base de sus experiencias vividas.

La práctica para el alumno siempre será indispensable, pues en sus propias experiencias deberá poner a prueba lo que ha aprendido teóricamente para resolver los problemas que se le presenten, de esa manera, el alumno podrá darse cuenta de que los saberes teóricos llevados a la práctica son útiles en los conflictos de la vida diaria.

En lo anteriormente mencionado, respecto a la práctica, el profesor debe darse cuanta y atender las necesidades de aprendizaje de sus alumnos, para que ellos a la vez produzcan sus propios procesos de aprendizaje y la forma de aplicarlos para la resolución de sus problemas, y no lo vean ni lo sientan como solo teoría impartida por el profesor, que muchas de las veces resulta molesta y poco interesante para los alumnos.

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