Cooperación Internacional En La República De Haití
Enviado por aguineav • 8 de Octubre de 2014 • 3.065 Palabras (13 Páginas) • 293 Visitas
Cooperación Internacional en la
República de Haití
Arturo Guinea Vendrell
Universidad Militar Nueva Granada
Maestría en Relaciones y Negocios Internacionales
Cooperación Internacional
Octubre/2011
Página 2 de 11
Índice
1. Consideraciones Preliminares (2)
1.1. Antecedentes Históricos (2)
1.2. Datos Claves del País (3)
1.3. Rasgos Generales de la Evolución Reciente (3)
1.4. USAID (8)
1.5. ONU (8)
1.6. OMC (8)
2. Discusión (9)
3. Conclusiones (10)
1. Consideraciones preliminares
La Republica de Haití, en criollo haitiano Repiblik Ayiti, es un país de las Grandes Antillas que ocupa el tercio
occidental de la isla de la Española con una superficie de aproximadamente 28,000 km2. Su capital es Puerto
Príncipe.
1.1. Antecedentes Históricos
La revuelta de los esclavos de Santo Domingo (zona francesa) fue el origen de la creación de la Republica de Haití,
que en 1804 se convierte en la primera república independiente de población mayoritariamente negra debido al
abandono de la isla por parte de la armada de Napoleón Bonaparte. Haití es también el único país francófono
independiente en el Caribe, y es también el primer país de población negra en obtener su independencia por sí solo.
Además, cabe anotar que Haití también ayudó a su vecina, la República Dominicana, a lograr su independencia y
que a partir del logro de la suya, se convirtió en la pérdida para Francia de su colonia más próspera.
Haití es un país en vías de desarrollo, que trata de erigirse como una experiencia democrática naciente y que intenta
organizarse y reconstruirse después del violento terremoto que devastó una tercera parte de su territorio.
En la actualidad Haití es uno de los países más pobres, densamente poblado y desforestado del planeta lo que lo
hace particularmente vulnerable. La pobreza significa que la gente toma lo que puede de la tierra, en este caso la
madera, que es quemada localmente o convertida en carbón de leña para su uso en las ciudades. De aquí que un
informe de Naciones Unidas encontró que el 97% de la superficie estaba seriamente impactada por la deforestación.
Sin árboles ni sus raíces para apuntalar el suelo, simplemente la lluvia lo arrastra, y se lleva la tierra de la superficie
convirtiéndola en lodo.
Lejos están los tiempos en que contaba con el liderazgo caribeño en el tema del turismo, mismo que mantuvo
durante los años 50s, 60s y 70s, cuando fue conocida como “La Peral de las Antillas, y que ahora ocupa su vecina la
República Dominicana con la cual originalmente compartía las mismas condiciones y recursos naturales, pero que a
diferencia de Haití, fueron administradas de forma más eficiente y actualmente constituyen una fuente de
condiciones de vida bastante favorables, tanto para sus propios habitantes como para los “resort centers” y
paradójicamente hasta para trabajadores migratorios haitianos que se ocupan principalmente en labores relacionadas
con la industria de la construcción.
La historia de Haití es una sucesión de desastres naturales y golpes de Estado. A las disputas entre los hombres se
sumó siempre la naturaleza, como si quisiera participar también en la fiesta macabra que arruinó a la república
negra de América latina.
La imagen del majestuoso Palacio Presidencial de Puerto Príncipe deformado por el temblor, como si lo hubiera
arrugado una mano gigante, es una trágica metáfora de esa conjunción de fatalidades, políticas y naturales, que
soporta Haití desde hace ya varios siglos. Una cadena de desgracias que perfilan una radiografía de un país en
terapia intensiva permanente, dependiente de la ayuda externa como un paciente hospitalario del suero fisiológico.
Más del 40 por ciento del presupuesto del país se cubre con fondos provenientes de la ayuda internacional.
Página 3 de 11
Hablar de Haití es definir la pobreza. Con una renta per cápita de apenas 1300 dólares al año, el país caribeño ocupa
el último lugar de la fila en el hemisferio occidental. El 80 por ciento de sus diez millones de habitantes vive bajo el
umbral de la pobreza, y más de la mitad, bajo la raya de la miseria. Una estadística que sería aún peor si a Haití no
llegaran cada año más de 1000 millones de dólares en remesas enviadas por los emigrantes. El índice de desarrollo
humano de la ONU sitúa al país caribeño en el puesto 149 de 183. La esperanza de vida apenas sobrepasa los 52
años.
Haití sólo despunta cuando las cifras se refieren a muertos, desastres naturales, golpes de Estado, matanzas,
secuestros y asesinatos y todavía en el siglo XXI continúa debatiéndose entre el grito independentista de Toussaint y
el machete fratricida de los Tonton Macoutes1.
1.2. Datos Claves del País
Población. Haití fue la primera república negra del mundo (el 95% de su población es negra) y fue el
primer Estado de América latina en lograr su independencia (de Francia, el 1° de enero de 1804).
Pobreza extrema. Es el país más pobre de América: el 80% de la población vive en la pobreza y el 60%
está desempleado. De acuerdo con cifras del Banco Mundial, el ingreso per cápita es de 390 dólares.
Desarrollo. La tasa de alfabetización es del 45%. De 183 países, Haití se encuentra en el puesto 149 en
cuanto a su índice de desarrollo humano.
Expectativa de vida. En Haití viven 8,5 millones de personas, con una expectativa de vida de 51 años en
el caso de los hombres y 52 para las mujeres.
Adicionalmente a la ya de por si alarmante situación del país, el estado de cosas empeoró significativamente con el
sismo de magnitud 7.0 del 12 de enero de 2010, que mató a más de 230,000 personas y dejó a 1.6 millones sin casa.
En total, más de 3 millones de haitianos se vieron afectados por el desastre.
La infraestructura pública crítica dentro de la que quedaron incluidas las redes eléctricas, de telefonía fija y celular,
escuelas hospitales y edificios administrativos, el principal Puerto y el aeropuerto internacional, fue destruida o en
condiciones inutilizables. El Banco Mundial y el Programa de desarrollo de las Naciones Unidas de evaluación de
necesidades posteriores a los desastres, estimó los daños y pérdidas totales en US$7.800 millones, lo que representa
un 120% del PIB
...