Critica Museo Mundo Maya

¿Realmente es un “Gran Museo”? ¿U otro claro ejemplo de cómo el aspecto publicitario-arquitectónico de la obra, está por encima de la importancia de atender las demandas culturales, económicas y sociales de la entidad, para lo que según, fue creada. Haciendo cita a la frase de la nota original (“A falta de ética nos queda la estética”), aquí hay un claro caso, de una estética arquitectónica con toneladas de “piel” metálica, según, “emulando” la naturaleza, inspirada el árbol sagrado La Ceiba junto con edificios de gran impacto internacional, simulando de igual manera, más a un nido, que al árbol mismo.

Proyecto que pretende convertirse en el eje expositor de la cultura maya de la región y espera aportar visitas turísticas de más de160 mil. El Gran Museo del Mundo Maya tuvo una inversión de cerca de los 900 millones de pesos, lo que nos deja una deuda por 20 años, mas un contrato de mantenimiento a particulares, lo que lleva a un total de 5 mil 500 millones de pesos, según documentos del contrato de PPS. Claramente éstos datos ponen en duda la rentabilidad del museo, agregando una evidencia o ejemplo más, de cómo los gobiernos ineficaces, con su forma pretenciosa y capricho, van por encima de las necesidades y opiniones de los ciudadanos, sólo para usar dichas construcciones como supuestos impulsos económicos y turísticos, como promoción de la imagen e interés político del gobierno en gestión; Un proyecto que no sustenta las necesidades y prioridades reales de la población. Otro derroche de los recursos públicos, agregando un futuro “Elefante Blanco” más a la ciudad.

Pasando el vestíbulo, se ingresa a cuatro salas de exposición que cuentan con esculturas, pinturas y demás objetos, la mayoría traídas del Museo Palacio G. Cantón de Antropología e Historia, después una sala de exposiciones temporal y una sala de cine. En general, el museo deja mucho que desear para el tamaño con el que cuenta, donde de las exposiciones se habla de todo menos de lo maya. Tristemente este edificio arruinó lo que pudo ser una excelente oportunidad de renovar alguna zona de la Ciudad que actualmente se encuentra en el olvido (que hay muchas). Lamentablemente por capricho irracional e interés político se escogió esa ubicación, que lejos de ser adecuada, ni siquiera respeta las normas del Reglamento de Construcción local.

BY: Raziel alias Leizarp

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