Cuidado Con El Jefe Ocupado

CUIDADO CON EL JEFE OCUPADO

Algunos directivos dedican cada minuto de su tiempo a considerar problemas estratégicos, para reducir costes, a pensar en enfoques creativos para los nuevos mercados para ganarle la partida a la competencia.

Pero si observamos, nos daremos cuenta que solo corren de una reunión a otra, revisan su correo electrónico, apagan fuegos detrás de otros y hacen innumerables llamadas telefónicas. Veremos una sorprendente cantidad de actividades que no dejan tiempo para la reflexión.

Los directivos siempre trabajan con mucha presión y tienen demasiadas cosas para hacer aunque solo trabajen 12 horas al día. Pero muy pocos de ellos emplean su tiempo con tanta eficacia como podrían.

Nos dice un estudio realizado durante los pasados 10 años que el comportamiento de los directivos ocupados de casi una docena de empresas, como SONY, LG ELECTRONICS Y LUFTHANSA resultaron interesantes ya que se demostró que el 90% de los directivos desperdician su tiempo en diferentes tipos de actividades ineficaces, y el 10% de los directivos dedican su tiempo en trabajar de forma reflexiva, con un propósito y compromiso.

CONCENTRACIÓN Y ENERGÍA

Nos dice que a los directivos no les pagan para que hagan que suceda lo inevitable. En la mayoría de las empresas, la rutina ordinaria del negocio se cumple sin mucha supervisión por parte de los jefes. El trabajo de los directivos es, entonces, conseguir que el negocio no solo siga adelante, sino que avance de forma innovadora y sorprendente para que de resultados a futuro.

Después de estudio realizado nos dimos cuenta de que los que realizan acciones eficaces son (aquellos que hacen que sucedan cosas difíciles e incluso aparentemente imposibles) se basan en la combinación de 2 características: concentración y energía.

La atención concentrada es la capacidad de centrarse en un objetivo y seguir la tarea de principio a fin. Los directivos concentrados no tienen una posición reactiva; deciden no responder inmediatamente a uno de los problemas que les llegan ni apartarse de sus objetivos por distracciones como el correo electrónico, reuniones, las contrariedades y exigencias imprevistas.

La energía es el vigor aportado por un compromiso personal intenso. La energía es lo que empuja al directivo a recorrer un poco mas de camino cuando se enfrentan a pesadas cargas de trabajo y al cumplimiento estricto de fechas.

La matriz concentración-energía

Alta

Desvinculación

Interés

Dilación

Distracción

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