Cultura Juridica

Señalar que el Derecho esta ligado con lo humano podría parecer obvio, curiosamente no es así, ya que en realidad por mucho tiempo el derecho se ha ocupado de muchas cosas menos de los humano. Se ha insistido en implantar mecanismos denominados humanos para destacar que el derecho debería ocuparse del tema, los ejemplos podrían multiplicarse, desde el derecho civil que trata de patrimonios, hasta el derecho constitucional que trata de normas de altísima jerarquía.

En cambio, la cultura jurídica se ha venido desarrollando como un instrumento conceptual para la comprensión del Derecho como fenómeno social y cultural valga la redundancia, las disputas sobre su concepto y sus componentes han contribuido a aclarar el concepto del mismo, el cual no es preciso, pero engloba las doctrinas, valores, expectaciones, actitudes y las instituciones jurídicas compartidas por la comunidad de profesionales y no profesionales del derecho, que ceden explicarlo a la hora de exponer el funcionamiento efectivo del sistema jurídico. Esto ha permite que la relación del Derecho y lo humano no se aleje de su teoría por completo.

En el plano del análisis sociológico, es esencial el estudio de las funciones de la cultura jurídica; ya que podría considerarse como las formas de ejecución de la cultura jurídica, insertas en el sistema de la actividad humana, las cuales son fundamentales para asegurar dicha acción. Friedman atribuye a la ‘cultura Jurídica’ la función de condicionar la producción de ‘demandas’ al sistema Jurídico por parte de los ciudadanos, de lo cual depende que ese sistema entre o no efectivamente en funcionamiento. La ‘cultura Jurídica’ “determinaría cuándo, por qué y dónde, las personas harían uso del derecho, de las instituciones jurídicas, de los procedimientos jurídicos y cuándo harían uso de instituciones alternativas o cuándo no harían nada” (Friedman, 1977).

A su vez Friedman establece un contraste entre la Cultura Jurídica Interna y la Cultura Jurídica externa; lo que este define como Cultura Jurídica Externa, se entiende como las creencias, opiniones y expectativas de aquellas personas que él considera operadores del sistema jurídico, considerada por este mismo especialmente significativa; como lo son: abogados, jueces, magistrados, es decir, todo aquel que ha tenido un entrenamiento oficial en el derecho; Cultura Jurídica Interna es aquella que sería la correspondiente al público en general.

Sin embargo la Cultura Jurídica de los venezolanos puede constituir una barrera para su acceso a la Justicia, ya que esta determina la decisión de los venezolanos de acudir a ella a resolver controversias y reclamar derechos, y nuestra cultura se caracteriza por la desconfianza en el estado de derecho, pues éste esta en desacorde con la efectividad del poder fuerte que creemos necesario. Asimismo, la evidencia que tenemos

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