Decreto

Viña del Mar, 06 de Junio del 2015

1. Introducción

El presente trabajo se plantea como objetivo el reconocimiento de los paradigmas educativos que sustentan el Decreto N°170 de Subvención Diferenciada para alumnos y alumnas con necesidades educativas especiales, que reglamenta la Ley 20.201. Es preciso señalar, que la elección del Decreto N°170 para el análisis de este informe, se basa en el reconocimiento que tiene éste dentro de la sociedad y el sistema educativo, como un elemento promovedor de la educación inclusiva dentro del país, por lo que resulta interesante el determinar si las concepciones paradigmáticas que sustentan este Decreto se condicen con los postulados del paradigma inclusivo o aún se guardan relaciones con los referentes integracionista, biomédico y/o psicométrico.

Por lo tanto, para favorecer el análisis se establecerán cuatro criterios de comparación entre los diferentes paradigmas educativos, permitiendo obtener claridad en los conceptos y concepciones de cada uno. Posterior a ello, se señalarán los postulados del decreto N°170 y se establecerán relaciones a partir de los criterios de comparación referidos a la comprensión del concepto de dificultad de aprendizaje, la evaluación, el objetivo de evaluación y la intervención; permitiendo determinar qué concepciones respaldan el Decreto N°170.

1. Análisis

El concepto de paradigma, hace referencia  a una red de conceptos que constituidos en una estructura coherente proporcionan modelos de problemas y soluciones, durante un tiempo a una comunidad científica (Kuhn, T., 1992). Aplicado esto a la Educación Especial, se puede comprender que un paradigma entrega los lineamientos de un modelo de pensamiento o de interpretación respecto  a la disciplina y su quehacer, configurando así un modo de actuar condicionado a este modelo de pensamiento imperante.

En Educación Especial, se reconoce un tránsito de paradigma, es decir, un cambio en el modelo de pensamiento que se ve reflejado en las políticas públicas educativas (Manghi, D; Julio, C.; Conejeros, L; Donoso, E.; Morillo, ML. y Díaz, C. 2012). Desde esta perspectiva es preciso reconocer qué diferencias existen entre un paradigma y otro a partir de diversos criterios, facilitando la comprensión de las creencias y concepciones que cada visión tiene dentro de la Educación Especial, así como el establecimiento de relaciones que permitan reconocer qué aspectos se encuentran en práctica dentro de nuestro sistema educativo. Para ello, en primer lugar, se debe reconocer que el desempeño de la Educación Especial se ha centrado en el cómo aprenden las personas que presentan características de aprendizaje diversas y en los apoyos especializados que requieren (Bravo, 2009), atendiendo la discapacidad desde diversas visiones paradigmáticas. Desde aquí se puede señalar que la disciplina de la Educación Especial surgió desde un modelo bio-médico,  luego se basó en un enfoque psicológico (Godoy, P.; Meza, M. y Salazar, A. 2004), para posteriormente comprender la educación desde un ámbito integracionista hasta transitar hacia la inclusión educativa de todas las personas. Para lograr una mayor comprensión de las diferencias de cada uno de los paradigmas, en el Cuadro Número 1 se presenta un comparativo, establecido a partir de los siguientes criterios:

• Dificultad de aprendizaje: de acuerdo a la propuesta del National Joint Committee on Learning Disabilities en 1994, se comprende por dificultad de aprendizaje los problemas específicos en la adquisición de destrezas básicas escolares, que suponen una base neurológica como causante, sin embargo este concepto ha ido cambiando de acuerdo a los nuevos antecedentes que se tienen y a la visión de dificultad que ya no se concentra tan sólo en el sujeto. De este modo, se establece como criterio de comparación dificultad de aprendizaje, con la finalidad de comprender la conceptualización de esta desde los diferentes paradigmas
• Evaluación: comprendida como un proceso por el cual se recoge y analiza información relevante de las situaciones de aprendizaje donde existen dificultades, determinando lo que un sujeto no aprende, aprende mal o bien lo que puede aprender (Romero, J., Lavigne, R., 2004).  Dentro de los cambios paradigmáticos de educación especial, la evaluación también se ha ido acomodando a las concepciones vigentes, es por ello, que este criterio de comparación pretende clarificar cuál es el objeto de evaluación en cada paradigma.
• Finalidad de la evaluación: se establece este criterio de comparación con intención de determinar cuál es el objetivo de realizar una evaluación de las dificultades de aprendizaje de acuerdo a cada modelo de paradigma. En este sentido, reconocer la finalidad de la evaluación permite la toma de decisiones posteriores acordes a los lineamientos de la misma evaluación.
• Intervención: entendido como las acciones específicas destinadas a promover los cambios necesarios para remediar y/o apoyar las dificultades de aprendizaje, logrando el aprendizaje del alumno en condiciones óptimas (Romero, J., Lavigne, R., 2004), asimismo el tipo de intervención dentro de cada paradigma se ajusta a la finalidad y al objeto de la evaluación.

Cuadro N°1 Comparativo de Paradigmas

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