Discurso de Promoción Caño Ajíes, 27 de julio de 2016

Caño Ajíes, 27 de julio de 2016

Discurso de Promoción

Buenos días a todos los presentes y en hora buena a todos los estudiantes promovidos. Un saludo especial a los directivos de la institución, a los maestros presentes, a los padres y representantes y demás invitados al acto académico  del sexto grado de la Escuela Bolivariana Caño Ajíes. Me gustaría  compartir con ustedes unas sencillas palabras y mi reflexión personal sobre el significado que tienen los padrinos y madrinas elegidos para un acto como este.

Ahijados y ahijadas, elegir a personas para que sean sus padrinos de promoción, implica más que una simple decisión u opción. Sería un gusto hacer referencia a todo lo que conlleva esta bonita elección. La palabra “madrina” como lo es en mi caso, es una palabra compuesta, que proviene del latín “Mater” que significa madre, unida al sufijo “ina” que significa segunda, es decir segunda madre, pues los padrinos vienen a representar en este caso unos segundos padres para cada uno de ustedes. Ahora bien, si ellos son sus segundos padre elegidos para un acto académico, son precisamente eso, padres académicos.

Por tanto la labor de cada padrino de promoción es ser un punto de referencia  académica y apoyo personal para cada alumno que lo ha elegido como padrino, por lo visto no es una labor fácil sino de mucha responsabilidad y compromiso, ya que esto implica apoyar a estos muchachos en sus nuevos caminos de formación, ya sea en el liceo y en la universidad. Más concretamente ayudarles en todo lo que humanamente sea posible para que sean hombres y mujeres útiles y de bien tanto para su comunidad como para este país que tanto lo necesita.

Mi consejo como su madrina es que aprovechen cada etapa de su vida para hacer lo que tienen que hacer y esto es crecer como personas y ciudadanos, saltarse las etapas solo les traerá sufrimiento y decepciones. Jugar a ser adultos si aun serlo, solo será una mala decisión, si miran al futuro con sueños y metas claras valorando cada oportunidad que le darán sus próximos profesores y esforzándose en sus estudios podrán alcanzar ese sueño del que hablaba el poeta cumanés Andrés Eloy Blanco cuando decía: Estudiar y esforzarnos por nuestras metas es construir nuestra felicidad.

Agradecidos con cada uno de ustedes y con sus maestros por darme la oportunidad de apadrinarles, no duden en buscar mi ayuda y solicitud cuando la necesiten. Gracias muchachos y suerte en esta nueva etapa de su vida. Mis mejores deseos y todas las bendiciones para cada uno de ustedes.

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