EL AGRIDULCE SABOR DE LAS UTILIDADES

EL AGRIDULCE SABOR DE LAS UTILIDADES

Las utilidades y su respectiva entrega en la empresa siempre estarán llenas de conflictos, debido a la desigualdad que existe en las cantidades que se entregan a cada uno de los trabajadores. Unos van pensando como invertirán este ingreso y otros simplemente lo ven pasar.

Para las personas que tienen la ventaja de recibir estas, pueden utilizarlas para comprar cosas o quizá para pagar todas sus deudas y ponerse al día. Por otro lado no todas las empresas que se encuentran en nuestro país son capaces de generar utilidades suficientes para poder repartirlas entre los trabajadores, si ni siquiera son suficientes para sus inversionistas, esta es la desventaja que existen en nuestro país, debido a que la mayoría únicamente logra mantenerse a salvo generando lo suficiente para subsistir.

Al momento de que una empresa genera grandes ventas y crece, no quiere decir que se encuentre en un momento radiante, ya que para determinar las utilidades intervienen una serie de variables que establecen la rentabilidad y habilidad de una empresa.

Conocer el contexto socio-político actual contribuye en la generación de utilidades, el Estado proporciona ventajas que benefician a los trabajadores, pero a la vez pone tantos impuestos y obligaciones que reducen las utilidades.

Algunas empresas debido a que tiene que pagar utilidades a sus trabajadores, mismas que no fueron generadas por la empresa, recurren al endeudamiento para cumplir con su pago. Las empresas no son comunicativas, por lo que no llegan a transmitir algunas estrategias que servirían para mejorar las utilidades de cada año, evitando recurrir a préstamos o alternativas que perjudiquen su funcionamiento y utilidad.

Producir utilidades dentro de la empresa se puede lograr, si se establecen reglas para los empleados y demás personas que conforman la empresa, debido a que los trabajadores actuarían de manera más responsable, aprovechando los recursos disponibles en la organización.

Por otro lado, las empresas buscan optimizar gastos, manteniendo una nómina adecuada, invirtiendo con inteligencia, estableciendo reglas que facilitan la producción, sin afectar a la calidad y con nuevas innovaciones para los clientes; pero también depende mucho del esfuerzo que pongan los socios para obtener utilidades y compartir lo ganado.

No importa la cantidad de utilidades que se reciba, siempre y cuando sea invertido de manera adecuada, con fines positivos que beneficien a los consumidores no sólo en el presente, sino en el futuro. Todo depende del consumidor, de cómo invierta, dónde, cómo, para qué y por qué compra, ya que es muy fácil dejarse llevar por los gustos y comprar cosas innecesarias, por ello es necesario invertir pensando en el beneficio y futuro.

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