EL DON DE LA ESTRELLA

ENSAYO EL DON DE LA ESTRELLA

En una aldea llamada Kalvala, ubicada en el polo norte, vivían en una cabaña un niño llamado Tulo y su hermanita Jaana.

Ellos eran huérfanos de padre y madre, quienes vivieron muy felices durante 15 años.

Tenían un perro de Pomerania de nombre Nikku.

Aunque ellos Vivian solos su tío Varno siempre estaba pendiente de ellos, e insistía mucho se fueran los dos a vivir con él y su esposa.

Tulo era un niño muy inteligente que a su corta edad, se sentía responsable de su hermanita Jaana.

Inicialmente la mentalidad de Tulo se veía reflejada en sus notas de su diario en el que se manifestaba gran pesimismo y decepción.

Una noche después de escribir en su diario, Tulo tomó la foto de su madre, y besó una y otra vez, diciendo Mamá… mamá….te extraño….te extraño.

Momentos después, Tulo, cojeando y apoyado en un bastón, salió con su perro a la pradera y observó las estrellas, en el cielo nocturno, se observaban maravillosas luces danzantes y de inmediato olvido sus tristezas al disfrutar aquel espectáculo.

La aldea era sencilla y con problemas comunes a todas las sociedades. Los habitantes se sentían aislados, desprotegidos e insignificantes. Sin embargo en la aldea existía el llamado “árbol de las estrellas” que era robusto y alto

Camino hasta el gran Árbol, se acostó a seguir observando el cielo. El árbol, era muy viejo su robusto tronco medio 15 cm.

Jaana lo llamaba su árbol de estrellas. El árbol se había convertido en un árbol de esperanza.

Leyendas decían que si silbabas a las luces del Norte podías invocar a los muertos.

Tulo comenzó a silbar una canción de Cuna que su madre le cantaba, Luego cerró los ojos y vinieron a él recuerdos de su niñez.

El padre de Tulo; Pedar Mattis talló en madera un pequeño par de equis para su hijo, tan pronto aprendió a caminar. Tulo logró dominar con el tiempo aquellos patines de madera.

Al cumplir 5 años Tulo ya podía manejar el lazo con suficiente destreza para sujetar a cualquier reno rebelde y su padre le había enseñado muchas técnicas de defensa.

Para los padres de Tulo, las costumbres del pueblo Sami eran muy importantes, El Reno era el elemento más importante para vivir, ya que era el único animal doméstico que puede sobrevivir al clima.

El rebaño de Los Mattis era muy productivo, proporcionaba leche, carne, ropa y hasta dinero cuando los vendían. Los años pasaron rápidamente y la fortuna de los Mattis crecía.

Pero lo que Tulo extrañaba no eran esos momentos, sino los días cuando iban su padre y él a cuidar a sus renos a las dunas de nieve en las temporadas de invierno y ahí era cuando pasaba mucho tiempo cerca de su padre.

Tulo era muy inteligente y siempre preguntaba el por qué de las cosas, su padre muchas veces no sabía que contestar a su hijo, por lo que decidió enviarlo a la escuela antes del tiempo indicado, su profesor habló con los padres de Tulo: Pedar e Inga, les dijo que su hijo era un muchachito muy inteligente, ya había aprendido a leer y a escribir cuentos y poemas que ellos como sus padres tendrían que apoyarlo para que el siguiera desarrollando esa inteligencia, y le dio la lista de varios libros para que se los compraran, y Pedar aunque él esperaba otra cosa para su hijo lo apoyo.

Los demás niños de la aldea se burlaban de él porqué siempre estaba con sus libros o volando cometas. Diferente a los demás niños que junto a sus padres se dedicaban al cuidado del venado, pues en esa aldea eso era de lo que vivían se alimentaban y vestían de ellos, de los venados, un día Inga le menciono a Pedar lo que estaba pasando con su hijo de las burlas que el niño sufría, así que Pedar no quiso que su hijo pasara más por esto y le dijo que ya verían que les iba a demostrar a todos que su hijo era como los demás, así que todos los venados estaban sueltos y los dos padre e hijo comenzaron a atraparlos.

Tulo giraba la cuerda sobre su cabeza y luego la lanzaba y atrapaba uno a uno y así hasta que casi terminaron de atraparlos, después había uno el más grande y fuerte Pedar le dijo a Tulo que ese él lo iba a atrapar pero Tulo no quiso le dijo que él ya lo había dejado capturar a los más débiles que lo dejara que él podía hacerlo y su padre se enorgulleció demasiado de él así que lo dejo continuar, Tulo lo miro, giro la cuerda sobre su cabeza y luego lanzo la cuerda, y enganchó al venado, todo iba bien entonces, un corderito paso por entre las piernas de Tulo e hizo que este perdiera el equilibrio y cayera, tenía la cuerda sujeta

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