EL PRINCIPIO DE BENEFICIENCIA.

EL PRINCIPIO DE BENEFICIENCIA.

El principio de beneficencia nos dice que debemos actuar en beneficio de los demás. Este se podría definir como el deber moral de hacer el bien. nos incita a proteger y defender los derechos de los demás, previniendo a estos de posibles daños; busca que se eliminen aquellas cosas que los puedan poner en peligro.

Hacer el bien es una característica que debería denotarse en todo aquel que ejerce la practica medica, esto en base a que todo acto que este practica trae consigo consecuencias en sus pacientes que bien pueden ser tanto benéficas como perjudiciales, es por ello que es deber del mismo realizar su labor de la manera mas profesional posible, con el objeto de lograr restaurar el bienestar de aquel que encontrándose en estado de enfermedad, acude en busca de ayuda profesional; a ellos es a quienes los pacientes dan su voto de confianza entregándoles su vida al estar esta en peligro, es por ello que el medico en respuesta a ello debería tener siempre la mejor disposición para así, sin importar cuan arduo sea alcanzar este logro, tratar de hallar solución y así devolverle la salud a su paciente; este principio describe las características que posee un verdadero medico.

Este principio le confiere al medico una gran responsabilidad ya que le permite a este que por medio de si, el paciente mantenga vivas sus esperanzas y expectativas , pero también implica riesgos, por lo que es necesario que se tengan presentes los principios autonomía y no maleficencia, ya que muchas veces las acciones de beneficencia no están libres de consecuencias negativas, esto hace necesaria una ponderación de beneficios e inconvenientes con respecto a un determinado tratamiento poniendo siempre por encima, todo beneficio que este le otorgue al paciente con el objeto de conseguir los mejores resultados pero teniendo presente todos los riesgos que el mismo implica para no comprometer la seguridad del paciente.

El principio de beneficencia se ve interrumpido por el de autonomía ya que la voluntad del paciente supera las buenas intensiones del galeno. Sin embargo se puede ver a estos como principios relacionados ya que si se analiza, no se puede hacer el bien a otro sin tener en cuenta lo que el considera que sea bien, pero el respeto a la autonomía no puede llevar a los profesionales a dimitir de su deber de beneficencia hacia los pacientes. Por ello se debe tener presente que la sustitución de un principio (beneficencia) por otro (autonomía) de un modo excesivamente radical puede acabar no representando un progreso ni un respeto a los derechos del paciente. Es por esto que pensamos como grupo que ambos, beneficencia y autonomía son de importancia no jerarquizada por lo explicado antes, además, cabe resaltar que aunque el principio de beneficencia lleva consigo a los valores que todo medico debe tener todos estos enfocados a un solo objetivo: el bienestar del paciente, se debe tener en cuenta que el hombre es un ser biopsicosocial y a pesar de que a nivel clínico las ideas del medico le serian de provecho, podrían estas acarrearle problemas en otras de las dimensiones que le acompañan por lo que se debe respetar las decisiones del paciente con relación a las alternativas de tratamiento que se les ofrezcan

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