EL PROFETA DE LAS NACIONES, JEREMIAS

EL PROFETA DE LAS NACIONES, JEREMIAS

LOS PROFETAS

Los Profetas en la Historia del Mundo han intervenido de distintas maneras a través de Dios. Este los elige como herramientas para transmitir su “Palabra” a través de la cual nos enseña como vivenciarla.

Profetas, voz griega que designa al que habla por otro, equivalente por en de a “interprete” o “vocero”; sin embargo poco importa el significado de la voz griega; debemos reunir a las fuentes, a la lengua hebrea misma. En el Hebreo se designa al profeta con dos nombres significativos “nabí” que significa “extático”, “inspirado”; el otro nombre es “roeh” o “chosen”, que quiere decir “el vidente”, el que ve lo que Dios le muestra en forma de visiones, ensueños, entre otros. Ambos nombres expresan la idea de que el profeta es instrumento de Dios, hombre de Dios que no ha de anunciar su propia palabra sino la que el espíritu le sopla e inspira.

JEREMIAS

No se es profeta por propia iniciativa, sino por determinadas cualidades o condiciones heredadas. Se es profeta por decisión y elección de Dios ; así Jeremías se convierte en un personaje publico y desarrolla su (publica) enfrentando a los poderosos de du tiempo con la firmeza de saber que tiene de su lado a Dios.

JEREMIAS: PERSONAJE PUBLICO

La historia de Jeremías como personaje público se inicia con el compromiso que su padre le da como descendiente de Aarón. Este con su familia llegan a Jerusalén, ahí su padre le recuerda Jeremías la grandeza de un pueblo tan pequeño e insignificante para los poderosos de esos tiempo diciéndole: “… esta ciudad nunca se destruirá, el Señor esta en ella… ”; Luego Jeremías y su padre se dirigen al Templo de Salomón, donde su padre debía alistarse para el sacrificio del cordero (Hoy celebración del Yitz ák o akeda [atadura][conmemoración del sacrificio de Isaac hijo de Abraham ]).

De acuerdo al Santo Santorum celebrarían el encuentro de las tablillas sobre las cuales Dios escribio su ley, testimonio de la alianza de Dios y su pueblo que los llevaria a vivir en "Libertad".

Luego en sueños un angel representado en el cuerpo de una niña le manifiesta a Jeremias:"mira esto Jeremias, antes de formarte en el seno de tu madre, ya te conocia; antes de que nacieras yo te consagre, y te destine a ser profeta de las naciones" (Jr. 1,5).

El miedo de un muchacho y su inmadurez como humano se manifiesta en Jeremías cuando le dice: “Ay, Señor, Yave, ¡Como podría hablar yo, que soy un muchacho!” (Jr. 1,6). A pesar de ello Dios le encarga la proclamación de su palabra… “En este día te encargo los pueblos y las naciones: …”(Jr.1,10).

La vida de un profeta no es fácil; la prueba mayor no es la hostilidad de los hombres, sino el aprendizaje diario

...