ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

El Capital Comercial


Enviado por   •  20 de Mayo de 2013  •  1.226 Palabras (5 Páginas)  •  431 Visitas

Página 1 de 5

2. El capital comercial y el capital de préstamo.

El capital comercial y la ganancia comercial.

El capitalista industrial es el primero en

apropiarse de la plusvalía creada por el trabajo de los

obreros. De él reciben lo suyo los demás

participantes del botín, ante todo, los representantes

del capital comercial y de préstamo.

Cuando en la empresa capitalista se ha producido

una mercancía, hay que venderla, para que con el

dinero cobrado se puedan volver a comprar medios

de producción, contratar obreros y proseguir la

producción. Si el industrial vendiese personalmente

su producción al consumidor, tendría que invertir

cierta parte de su capital en instalación de los locales

comerciales, en contrata de dependientes, etc.

Dejando que se ocupe de ello el comerciante, el

industrial le cede cierta parte de su ganancia. Le

vende la mercancía al precio de fábrica, más bajo que

el precio de producción.

La ganancia comercial es, por consiguiente, una

parte de la plusvalía, que el industrial cede al

comerciante. Al invertir determinado capital, el

comerciante debe de tener sobre este capital una

ganancia de magnitud habitual. Si su ganancia resulta

inferior a la ganancia media habitual, la ocupación

comercial resulta desventajosa.

El capital de préstamo.

Una vez vendida la mercancía, el capitalista no

tiene que gastar inmediatamente el dinero que ha

cobrado por ella. El capitalista se ve con unos

recursos monetarios que hasta cierto tiempo no le

hacen falta.

Todo capitalista posee en determinados momentos

un excedente de capital monetario que no encuentra

aplicación. Es un capital inactivo, es decir, un capital

que no reporta ganancia. En otros momentos, al

capitalista le falta dinero, por ejemplo, cuando

L. Leóntiev

26

necesita comprar equipos nuevos. A fin de asegurar

el funcionamiento de la empresa sin intermitencias,

el capitalista debe disponer de reservas que se

emplean en los períodos de escasez de dinero y que,

en los demás períodos, permanecen inactivas.

Ahora bien, los capitalistas son muchos. Mientras

en manos de uno se encuentra cierto excedente de

capital monetario, otro puede sentir una necesidad

temporal de dinero. La competencia obliga al

capitalista a que se preocupe de que cada partícula de

capital rinda lucro. Por eso, el capitalista aprovecha

el dinero disponible, lo deja prestado a otros.

Teniendo la posibilidad de conseguir dinero

prestado, el capitalista industrial se ve libre de la

necesidad de guardar cantidades considerables de

recursos monetarios en estado inactivo. Y la cosa no

termina ahí. Con ayuda del dinero prestado, el

capitalista puede ampliar la producción, aumentar el

número de obreros que explota y, por consiguiente,

lograr más plusvalía.

Una parte de la plusvalía la paga el industrial al

capitalista prestamista bajo la forma de recompensa

por el capital-dinero que le ha sido prestado. Esta

parte se llama interés. El capital de préstamo es el

capital-dinero o capital monetario que produce

interés.

Los bancos son comerciantes en capital. El

interés.

El movimiento del capital de préstamo lo realizan

los bancos, los cuales, por una parte, recogen todos

los capitales inactivos y, por otra, conceden capital

monetario a disposición temporal de los capitalistas

que lo necesitan.

La base inicial de las operaciones bancarias era la

mediación en los pagos. Los patronos individuales

suelen tener sus recursos monetarios en el banco. A

disposición suya, el banco realiza unos u otros pagos.

De este modo, los bancos recogen todos los ingresos

monetarios y los prestan a los capitalistas.

Así, el capital se convierte en mercancía, con

ayuda de la cual se practican transacciones de

compra y venta. Los bancos son comerciantes en

capital.

Revistiendo la forma de mercancía al ser capital

de préstamo, el capital tiene precio. El precio del

capital es el interés, es decir, la cantidad de dinero

que se paga por el uso de capital de determinada

magnitud durante un determinado plazo. Si por el uso

de 100 dólares durante un año se cobran 3 dólares se

dice que la tasa de interés es del 3%.

Los bancos tienen distintas tasas de interés para

distintas operaciones. Para los depósitos (las

llamadas operaciones pasivas) fijan un interés

inferior que para los préstamos (las llamadas

operaciones activas). También por los préstamos

concedidos en distintas condiciones (según los

plazos, etc.) se cobran tasas diferentes. Tampoco es

siempre igual la

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (9 Kb)
Leer 4 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com