El Maestro De Secundaria Y Los Adolescentes

DESARROLLO

“Los restos del maestro de escuela secundaria en el trabajo con adolescentes”

Las personas que deciden desempeñarse como docentes tienen en sus manos un gran poder que

conlleva una gran responsabilidad. Ser docente va mas allá de una simple transmisión de

conocimientos; cada nivel educativo exige diferentes objetivos y metas tanto al alumno como al

docente.

Una de las principales habilidades que los maestros deben dominar es la de atender tanto los

avances como las dificultades de los alumnos. Lo cual permite ir adoptando la forma y el ritmo

más conveniente de trabajo, tanto colectiva como individualmente.

Yo lo podría comparar con cualquier profesión, para desempeñarla correctamente es de vital

importancia conocer al máximo el objeto con el cual se trabaja; en este caso es el alumno.

Otro de los retos mas difíciles de los docentes es el de lograr la asertividad en el aula mediante

reacciones, actitudes e intereses que los alumnos van teniendo a lo largo de la clase.

Obviamente no a todos les interesan los mismos temas o de igual manera y el reto nace justo ahí,

el profesos debe encontrar la forma más adecuada para atraer a los alumnos al tema y sobre todo

generar un interés.

Sin olvidar que este reto lleva implícito uno más, el de encauzar las actividades de enseñanza. El

maestro puede poner muchas actividades a los alumnos para despertar su interés y atención pero

si esas actividades no logran crear relación en cuanto a un aprendizaje, podría decirse que el

maestro no cumplió satisfactoriamente el reto.

Existen muchos maestros que mediante actividades son expertos en mantener a los alumnos

atentos, pro carecen de conocimiento, o de la transmisión de los mismos. También existen los que

transmiten mucho pero no logran captar la atención del aula.

Encontrar un nivel entre ambos extremos seria lo más conveniente.

En base a la observación puedo decir que hoy en día estos retos se quedan lejos de ser siquiera ser

alcanzados.

Al parecer al maestro lo que menos le importa es preparar su clase y mucho menos las

necesidades o preocupaciones de los alumnos. En cuanto a esto se ve una respuesta reciproca por

parte de los alumnos.

Creo que todo el problema radica en la falta de planeación de las clases debido a que en esta

actividad debería considerarse las necesidades de los alumnos, así como sus intereses y eso

provocaría un cambio positivo en su actitud ante la clase y eso mismo encauzaría las actividades.

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