El Plegado En Húmedo

El Plegado En Húmedo

(¿Qué es eso?)

Cuando uno se introduce en el mundo de la papiroflexia, se empieza a encontrar con

cosas raras, cree que se empieza haciendo pajaritas y se evoluciona haciendo cosas más

complicadas pero basadas en el mismo principio, coge un folio, cortalo para conseguir

un cuadrado y empieza a doblarlo.

Una de las primeras cosas raras que vemos, y que generalmente nos encanta es el papel

de colores, y comienza una búsqueda de tipos de papel, el más facil el charol, pero que

manía tiene el canalla de abrirse y desarmarse, y la búsqueda continúa.

A continuación nos encontramos con los módulos, las figuras modulares, que ponen a

prueba nuestra fe en el cuadrado y en la imprescindibilidad de la pieza única. ¿Será una

herejía?. Por lo menos nos hace dudar.

Y después e mas o menos etapas nos encontramos con el plegado en húmedo, esas

figuras todo volumen, hechas en un cartón (o al menos lo semeja) que parece poco

menos que imposible de plegar, nos informamos (léase preguntamos) y resulta que están

realizadas con la técnica del plegado en húmedo, técnica arcana y desconocida para los

enanito de a pie a los que epata y conturba.

¡Pues Bien! El otro día ascendí de “categoría” entré en el mundo del plegado en húmedo

y os voy a contar mi experiencia

Lo primero es mirar, observar el método del maestro, en mi caso de las manos de

Anibal Voyer .¡Cuidado! Según él mismo confeso es algo “heterodoxo”, a lo mejor ya

estoy echado a perder, pero su técnica me pareció bastante válida (aunque bastante

diferente de todo lo que había leído de pluma de los grandes gurús)

Una vez observado lo facilisimo que es, y de preguntarte porque no lo hacen los niños

de dos años, comienza la prueba donde descubres que si, que es sencillo, pero dentro de

un orden y que las figuras no se pliegan ellas solas, tenemos que hacerlo nosotros.

Vamos con la parte práctica. Cuando vamos a hacer un modelo plegado en húmedo es

importante conocer el modelo, es decir, aunque vayamos a tener un libro delante, no

deberíamos tener que dudar en cuanto a como y por donde doblar, porque cualquier

error se “paga” pero no preocuparse, el primer modelo no ira a ningún museo (digo yo)

El papel (je je) aquí me entran las dudas. Yo vi como se plegaba un “papel”

maravilloso, y yo mismo plegué este “papel” maravilloso, y funcionó, pero me queda la

duda si este “papel” es el único que aguanta esta técnica, aunque, aunque así fuera

tampoco sería un desastre porque ya he dicho que el “papel” era maravilloso y de unos

colores encantadores. Así pues os recomiendo encarecidamente que uséis el Canson

Miteintes en el color que queráis, y si no me haceis caso no admitiré ningún tipo de

reclamación.

¿Donde se puede conseguir? Pues me imagino que en cualquier papelería lo

suficientemente decente y con un poquito de ínfulas artísticas pues es una cartulina

realmente fácil de encontrar.

¿Ya la tenemos? Pues nada, a empezar por el principio: cortar el papel

OJO cuando vayamos a cortar el papel cuidado de no marcar pliegues, si es necesario

usad una regla y un lapiz para marcar las dimensiones.

Supongo que habréis escogido, guiados por mis sabios consejos, un modelo sencillo

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