El Saber De Los Maestros

ncidencia de la autoridad dentro del grupo: El docente como facilitador.

La autoridad, la significación que tiene para cada individuo su relación con las figuras de autoridad es enorme, ya que el infame humano depende para su supervivencia de la atención y cuidado que le brinden sus padres, o quienes hacen las veces de tales, los que, al criarlos, protegerlos, socializarlos y educarlos les van imprimiendo la impronta de su figura como autoridad y como modelos de identificación, generando así un vinculo interno primario prácticamente indeleble.

A la luz de experiencia de este tipo podemos afirmar que no siempre la persona que se encuentra institucionalmente al frente de un grupo es aceptada o reconocida por este como autoridad, este debe ejercer la conducción de un grupo de tiene que lograr de algún modo, el reconocimiento de ese liderazgo, la autoridad de un grupo incide fuertemente en la gestión del clima grupal al dar la tónica del la matriz vincular, nos referimos a una autoridad que es reconocida a aceptada por el grupo como tal y muy importante a explorar es el de que tipo de factores promueven la aceptación de una autoridad por parte de un grupo, más allá de la asignación institucional del rol.

También hay factores que dependen de las actitudes asumidas por la autoridad o quien intente serlo. Al respecto, quizás, uno de los puntos importante tenga que ver con la coherencia actitudinal y una cierta firmeza o seguridad en el encuadre del rol de autoridad que se propone implementar, lo cual no significa, necesariamente, en absoluto, una actitud autoritaria.

Ahora bien, cuando el maestro tiene la capacidad de comprender desde adentro las reaccione del estudiante, cuando tiene una apreciación sensible de cómo se presenta el proceso de aprendizaje al alumno, entonces podrá facilitar un aprendizaje significativo.

La comprensión epatica, es la reacción del alumno responde al siguiente modelo por fin alguien comprende como siento y como soy yo, sin querer analizarme ni juzgarme. Ahora puedo prosperar, crecer y aprender, las actitudes donde predominan una tónica descalificatoria y punitiva, que tiene a reforzar los temores latentes, activando los mecanismos de defensa y ataque.

Por ejemplo, el ironizar tender a humillar al alumno, poner en duda de continuo su capacidad u honestidad, poner énfasis en los errores en el proceso de aprendizaje como algo “punible”, amenazar o amedrentar, o utilizar rótulos.

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