El Viaje De Beagle

EL VIAJE DE BEAGLE

A los 22 años, Darwin se enroló como naturalista en el velero Beagle. En su viaje de cinco años alrededor del mundo pudo recoger y observar una gran diversidad de plantas, animales y fósiles. Las observaciones y estudios realizados sobre la gran diversidad de seres vivos le hicieron dudar de que las especies se mantuvieran fijas e inmutables.

Las visitas a las islas Galápagos fue especialmente interesante. En dicho archipiélago, situado a unos 1.000 Km de la costa continental, viven 14 especies de pinzones que presentan picos adaptados a los distintos alimentos que ingieren. Sin embargo, en el continente no observa esta diversidad. Las islas Galápago. De origen volcánico, surgieron del fondo del mar, y sin duda los pinzones tuvieron que llegar a ellas precedentes del continente

Al llegar los pinzones desde el continente, encontraron un paisaje deshabitado con gran cantidad de alimento a su disposición.

Fueron especializándose y adaptándose para aprovechar mejor los recursos alimenticios. Aislados de los demás, estas diferencias adaptativas fueron aumentando, hasta originar las distintas especies halladas por Darwin.

El viaje

A pesar que la misión del Beagle era pacífica, era incierto el que pudiera retornar sin novedad a Inglaterra. El riesgo de un naufragio en las peligrosas aguas de las costas de América del Sur era grande, dadas las condiciones de navegación de esos días. En tierra, el viajero corría peligro de ser disparado o acuchillado por revolucionarios o indios rebeldes, ya que después de las guerras de la independencia, más que nunca, se sentía en el ambiente el descontento político.

La minuciosidad del reconocimiento requería que el Beagle navegara por la línea costanera de Sudamérica varias veces, retornando repetidamente a los mismos puertos. La lentitud del plan dio a Darwin la oportunidad de explorar unas veces a pie y otras a caballo, solo o acompañado de guías, algunas de las regiones más agrestes del mundo.

Los cargamentos de plantas tropicales, insectos, conchas, rocas y fósiles que él envió a gran Bretaña causaron gran revuelo en los círculos científicos.

BRASIL

La explotación realizada en Brasil del 28 al 5 de julio de 1832, fue una de las experiencias más hermosas del viaje. Después de su primer día en Bahía, el 26 de febrero escribió: Deleite es una palabra muy pobre para expresar los sentimientos de un naturalista que, por primera vez, se encuentra vagando por la selva brasileña.

La misa

Durante el viaje, la Biblia era el vínculo que existía entre Darwin y Fitz Roy (el capitán del Beagle) y tanto el uno como el otro aceptaban la idea que prevalecía en esa época de que las especies eran fijas e inmutables tal y como lo indicaba la Biblia en la parte referente a la creación.

ARGENTINA

Desde Brasil el Beagle navegó hacia el sur y exploró la costa occidental durante unos meses visitando varias veces Montevideo y Buenos Aires.

Darwin tenia ilusión de llegar a Bahía Blanca, pues estaba ansioso de explorar este territorio conquistado recientemente y utilizado como fortín en contra de los indios.

El milodón

El hecho más importante y emocionante de la primera visita de Darwin a Bahía Blanca y Punata Alta ( septiembre a octubre de 1832) fue el descubrimiento de huesos de fósiles. A su regreso el año siguiente encontró aún más y más fósiles. Toda aquella región de las pampas estaba plagada de estos inmensos animales. El Mylodón tenía una lengua larga y extensible como la de la jirafa, la cual, por medio de esos maravillosos artificios de la naturaleza puede alcanzar el alimento verde con la ayuda de su largo cuello.

Los fósiles encontrados por Darwin existían únicamente en América del Sur y que hasta ese entonces eran desconocidos

Glyptodonte

La semejanza que existía entre el Glyptodonte con el conocido armadillo era un hecho que sorprendía enormemente a Darwin, ya que su evidencia geológica contradecía la historia bíblica de la creación. Darwin se preguntaba por qué el armadillo era tan parecido en forma pero no en tamaño a este ya extinguido y gigante Glyptodonte.

TIERRA DEL FUEGO

El 28 de noviembre de 1832, el Beagle se enrumbó desde la Bahía de San Blas a Tierra del Fuego y hacia mediados de diciembre estaba cerca del Cabo San Sebastián, una parte de Tierra del Fuego que era desconocida para la tripulación. Después de entrar en el famoso estrecho de Le Maire, ancló en la Good Success Bay.

Nativos de la tierra del fuego de FitRoy

En la carta fechada 11 de abril de 1833 dirigida al Profesor Henslow, Darwin escribía: No creo que exista espectáculo más interesante que el observar por primera vez al hombre en su estado primitivo. Esto es algo que uno no puede siquiera imaginarse sin haberlo antes experimentado. Nunca olvidaré el día que llegamos a Good Success Bay, nos recibieron con gritos de alegría. Estaban sentados en un sitio alto, rodeado por un bosque de hayas, alzaban sus brazos por encima de la cabeza y sus pelos largos ondeaban el viento.

Parecían almas en pena de otro mundo.

Puerto Louis

A Darwin le extraño mucho el que en las islas Malvinas, a pesar de estar a pocas millas de distancia de Tierra del Fuego, en la misma latitud, con el mismo clima y formación geológica idéntica, no existiera casi vegetación en comparación con Tierra del Fuego donde la vegetación era abundante.

ARGENTINA Y URUGUAY

Saliendo de las islas Malvinas en abril de 1833, la ruta de exploración del Beagle continuó por el norte hacia Montevideo y Maldonado. Darwin permaneció en la costa algunas semanas para explorar la región circundante a Maldonado y recolectar pájaros y animales.

Anotó en su diario que: “unos pocos reales habían reclutado a todos los chicos de la localidad para mi servicio y fueron pocos días en los cuales no me trajeron alguna criatura interesante”. El 29 de junio se embarcó nuevamente con toda su colección.

Flamencos

En el camino y hacia Bahía Blanca, Darwin cabalgó por pantanos y marismas. Llagó a Bahía Blanca el 18 de agosto de 1833, pero no había noticias del Beagle. Esperó ansiosamente hasta el 24, día en que avistó el Beagle. Después de una reunión con sus compañeros, acordaron que mientras ellos continuaban con sus investigaciones, él iría a vagar por tierra como el capitán FitzRoy solía decir, para reunirse con ellos más tarde. Su meta era llegar a Santa Fe, por el río Panamá.

Uno de los fósiles más interesantes que encontró fue el diente de un caballo contemporáneo de los monstruos prehistóricos. Esto probaba que existían caballos nativos de América del Sur antes de que los españoles trajeran los suyos.

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