El amor

El amor no es un sentimiento fácil para nadie, sea cual fuere el grado de madurez alcanzado. Todos los intentos de amar están condenados al fracaso, a menos que procure, del modo más activo, desarrollar su personalidad total, en forma de alcanzar una orientación productiva; y de que la satisfacción en el amor individual no puede lograrse sin la capacidad de amar al prójimo, sin humildad, coraje, fe y disciplina.

El amor es un arte ya que requiere conocimiento y esfuerzo. Todos necesitamos de amor y siempre hay algo que aprender acerca de éste aunque muchos no lo creen, ya que vivimos rodeados por tres principales premisas que nos hacen pensar así:

1.- Para muchos de nosotros, el problema del amor se basa principalmente en ser amado, y no en amar, no en la propia capacidad de amar; nuestro problema es cómo lograr que se nos ame, cómo ser merecedores de amor.

Para alcanzar este objetivo, optamos por seguir varios caminos; uno es tener éxito, ser tan poderoso y rico; otro consiste en ser atractivo mediante el cuidado del cuerpo, la ropa, etc.; también suele ser usado el tener modales agradables y conversación interesante, ser útil, modesto, inofensivo. Prácticamente para nuestra sociedad los merecedores de amor son una mezcla de popularidad y sex-appeal.

2.- Creemos que el problema del amor es el de un objeto y no de una facultad; creemos que amar es muy fácil, pero lo difícil es encontrar un objeto apropiado para amar o para ser amado por él.

La mayoría vivimos con la idea del amor romántico y aspiramos a encontrar uno para tener una experiencia con él que nos lleve al matrimonio. Básicamente está muy relacionada con el deseo de comprar, de un intercambio mutuamente favorable. Es como si una mujer u hombre atractivos fuesen los artículos que se quieren adquirir. “Atractivo significa habitualmente un buen conjunto de cualidades que son populares y por las cuales hay demanda en el mercado de la personalidad. Las características específicas que hacen atractiva a una persona dependen de la moda de la época, tanto física como mentalmente.” Es como un buen negocio: el objeto debe ser deseable, y al mismo tiempo resultarle deseable; las personas se enamoran cuando creen encontrar el mejor objeto dentro de sus posibilidades.

3.- Confundir la experiencia al “enamorarse” y la situación de permanecer enamorado.

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