El diario de la princesa feudal

El diario de la princesa feudal

Instituto Potosino Marista

Materia: Historia

Sara Ramírez Vázquez 21-26

06 de noviembre del 2012

Día 1

Heme aquí escribiéndote como si me escucharas, me leyeras, me entendieras…; aunque  yo se que nada de eso ocurre, aquí estoy para contarte mis anécdotas y mi historia, mi presente y mi futuro.

Es la primera vez que hago esto así que perdón si no es lo que esperabas… me doy risa a mi misma; estoy hablando con un cuaderno con páginas en blanco esperando a ser llenadas…

Oh! Pero que descortés soy… me presento, soy Eleonor, pensaras que soy una simple joven común y corriente, eso mismo pienso yo, pero las demás personas no piensan igual, a ellos apenas y les dices mi nombre y ya se encuentran haciendo alabanzas y demás, no entienden que solo soy una persona más, te preguntaras: ¿Por qué hacen todo eso?... Simple, yo soy la hija del señor feudal. Solo tengo un hermano, el cual es mayor que yo, su nombre es David; yo acabo de cumplir mis 16 años, todo el feudo estuvo de fiesta el día de mi cumpleaños, me llenaron de regalos, bendiciones y demás, yo sería feliz si solamente pudiera tener un día de calidad con mi familia en vez de fiestas extravagantes…

Vivo en un gran castillo, mi cuarto ha de ser del tamaño de 2  casas de los siervos, a mi padre no le importa la pobreza ni la injusticia que hay en el feudo, a él solo le interesa cuanto poder tiene y todos los festines que pueda hacer…

Bueno…  pues este es mi mundo; magia, romance, y  acción son las palabras que describirían mi vida.

Me despido de ti por hoy, mi madre me está hablando para bajar a la “merienda” y es entre comillas ya que parece un show lleno de extravagancias en vez de una simple comida.

Hasta pronto, con cariño.

-Eleonor

Día ll

(O más bien  dicho, noche)

Como ya te había comentado anteriormente, acabo de cumplir mis  16 años y en estos recibí muchos regalos, y mis padres mandaron hacer un festín ya que el cumpleaños número 16 de una hija de un señor feudal es el Más importante, al cumplir sus 16 años, la joven (en esta caso, desgraciadamente soy yo) tiene que escoger, entre un grupo de caballeros, al joven que gobernara el feudo junto con ella; y para esto tiene que luchar a muerte para conseguir la mano de la princesa…

¡Ja! ¡Pamplinas!  Esto es ridículo, no hay necesidad de que caballeros mueran para conseguir mi mano, aparte Nunca elegiría a uno de ellos; ya que mi corazón ya tiene dueño, estoy profundamente enamorada de un siervo de mi padre.

Su nombre es Felipe, es tan único, sus ojos reflejan la belleza del mundo y cuando canta todas las aves callan para poder escuchar su canto… pero nada es perfecto; yo al ser la hija del señor feudal, tengo estrictamente prohibido relacionarme de ninguna manera, ni amorosa ni de amistad, con la servidumbre.

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