Ensayo: La Sonrisa

Daniela Salgado

2°A

La Sonrisa

Sonreír es algo que realizamos diariamente de manera automática. Son raras o nulas las ocasiones en que verdaderamente nos detenemos a pensar en los beneficios que aporta este gesto a nuestra vida. Entonces, buscando informar más acerca del tema en cuestión, he decidido hacer mi ensayo sobre esta expresión facial tan común.

“¿Cómo podemos hacer algo todos los días y aun así no saber qué efectos tiene en ti?” es algo que me pregunto con frecuencia, sin embargo, es un acto que yo misma realizo constantemente en mi día a día. Teniendo como propósito acabar con mi desconocimiento sobre ciertas acciones que llevo a cabo regularmente y sus consecuencias en mí, comencé a investigar acerca de las aportaciones que brinda una ordinaria expresión facial. Pero antes de todo esto, realicé mi hipótesis acerca del asunto.

Pienso que  sonreír es un imán de cosas benefactoras y que si todos procuráramos hacerlo siempre que pudiéramos, el mundo sería un lugar diferente. Mi teoría es la siguiente: al realizar este gesto, programas a tu cuerpo para ver todo con positividad. Es decir que, aunque la sonrisa no sea honesta o verdadera, ésta hace que te concentres mayormente en los sucesos buenos que en los malos dando la sensación de que únicamente se te presentan eventos favorables. Pese a que te da este sentimiento, esto es falso,  sólo cambiaste tu percepción pero los acontecimientos adversos siguen ahí.

        La creencia de que una expresión facial puede afectar de manera positiva tu vida la desarrollé hace un par de años mientras cursaba secundaria. Me encontraba atravesando esa complicada etapa de la adolescencia en la que sientes que no haces nada bien y que no encajas en ninguna parte. Me entristecía con facilidad y raramente sonreía. Un día como cualquier otro después de leer que fingir una sonrisa puede alterar tu humor, tu autoestima además de otros aspectos psicológicos, tome la decisión de forzarme a sonreír solamente durante la escuela para ver qué tan cierto era lo que decía aquel artículo. Los resultados fueron impresionantes, no sólo me sentí más positiva sino que también sentí que la positividad de la gente cercana a mí aumentaba. Después descubrí que ese día de clases fue como cualquier otro y que el único factor que se había modificado era mi enfoque en los eventos a mi alrededor.

        Gracias a este hallazgo, mi vida dio un giro de 180°. Ahora sonrío con mucha frecuencia y vivo bajo el lema de: “Positividad ante todo.” Es obvio que la vida no es de color rosa y que hay situaciones en las que un gesto facial no puede contrarrestar el enorme peso de una situación difícil, no obstante, es mejor esforzarse por poder poco a poco esbozar una sonrisa que hundirte en pensamientos negativos.

        Ahora que he explicado mi teoría acompañada de una anécdota, incluiré los datos científicos acerca de los beneficios que vienen al sonreír. (Seleccioné los que más llamaron mi atención debido a que encontré bastantes.)

Liberamos endorfinas al sonreír: “Estos neurotransmisores son activados por los movimientos de los músculos de la cara, los cuales son interpretados por el cerebro, que a su vez libera estas sustancias químicas. Las endorfinas son responsables de hacernos sentir felices, y también de ayudamos a bajar los niveles de estrés. Inclusive fingir la risa o una sonrisa funciona ya que el cerebro no distingue entre lo real o lo falso e interpreta la posición de los músculos de la cara de la misma manera. Esto se conoce como la hipótesis de la retroalimentación facial. Mientras más se estimula el cerebro para liberar esta sustancia química más nos sentimos más felices y relajados.” Naturisima.net (11 de septiembre de 2013) 7 beneficios de sonreír que probablemente desconocías. Recuperado de: http://www.naturisima.net/index.php/128-problemas-de-salud/mente-y-emociones/18433-7-beneficios-de-sonreir-que-probablemente-desconocias

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