Fiesta De Hallowen
Enviado por • 16 de Febrero de 2015 • 715 Palabras (3 Páginas) • 223 Visitas
LA FIESTA DE HALLOWEN
Hacía algún tiempo uno de mis tíos nos invitó, a mi esposa y a mí, a celebrar la fiesta de Halloween. Así fue que aquella noche nos juntamos en la casa de mi tío. Un hombre maduro pero de muy buen ver, que nos recibió muy gentilmente, y que para esta ocasión había preparado una cena para una docena de personas.
La cena estuvo muy sabrosa y muy bien acompañada de buenos vinos, de los cuales le agradecimos mucho
Luego de la cena, pasamos a la terraza, donde se había dispuesto todo para una velada bailable. Bailé toda la noche y el tiempo pasó volando y yo ya un poco embriagado por la música, fui a conversar con mi tio quien empezó a hablarme de los viejos tiempos, cuando toda la familia se reunía con cualquier pretexto de celebración.
Si pues tío. -Le conteste- Pero eran otros tiempos, ahora los que no han pasado a mejor vida se han ido a vivir lejos de aquí.
-Tienes razón sobrino - Me contesto el tío. Añadiendo- Por eso yo he optado por tener otra familia. ¿Te gustaría conocerla?
Y mientras hablábamos y casi sin darnos cuenta habíamos empezado a alejarnos del bullicio y nos aventurábamos por una parte oscura y silenciosa de la casa. Cuando me di cuenta estábamos en una habitación grande e iluminada por pesados candelabros y llena de extraños personajes que me saludaban con reverencias. Yo, algo sorprendido miré a mi tío, pero este ya no estaba y en su lugar habían dos mujeres ataviadas con túnicas negras y con los rostros cubiertos por máscaras, que me tomaron de las manos y me llevaron a una pequeña habitación anexa. Yo cada vez más asombrado y asustado les preguntaba qué era todo esto - ¿Es acaso parte del espectáculo de Halloween? Pero ellas no respondían nada y empezaron a desvestirme y a sumergirme en una bañera llena de agua limpia. Sentí que la piel se me erizaba y que el pánico empezaba a apoderarse de mí y ya casi no pronunciaba ninguna palabra, entonces una de las mujeres me acercó una copa y me hizo beber de ella. Un sabor agridulce inundó mi boca y se escurrió por mi garganta. Y al instante sentí que todo mi cuerpo se relajaba y el temor daba paso a una dulce sensación de bienestar. Cuando salí de aquel recinto, el miedo ya se había esfumado de mí y caminé como en sueños hacia el cuadro que se levantaba majestuoso delante mío. Allí vi que mi tío se me acercaba, esta vez ataviado con una larga capa de color negro, me tomaba de las manos y todos los presentes gritaban a una sola voz: Bienvenido a la familia.
Y mi tío repitió a una sola voz… Sí mi sobrino, bienvenido a la familia. Y rozando su boca en mi oído susurró; desde que eras un niño supe que eras el elegido y enseguida me acercó un recipiente y empezó a untar mi frente con una especie de aceite, de un olor tan fuerte que me hizo perder totalmente la concentración que me quedaba y caí en un pozo oscuro e infinito.
Ya
...