Flauta

Escoge un bambú de buena calidad. Al momento de seleccionarlo, asegúrate de que el diámetro sea de entre 1,9 y 2,2 cm (3/4 y 7/8 de pulgadas). Por otro lado, un bambú de paredes delgadas de aproximadamente 0,3 cm (1/8 de pulgada) produce el mejor sonido. Asimismo, busca un buen pedazo de bambú que no esté rajado. Este no debe ser muy flexible o tener rajaduras, rupturas, astillas o agujeros visibles. 

• Asegúrate de que el bambú tenga al menos un nudo o nodo, que es un punto en el que la parte interior es sólida y no hueca como en el resto de la planta. Normalmente está marcado por un relieve circular que tiene la apariencia de una articulación. Un nudo al final del bambú se convertirá en lo que se conoce como el “corcho”, y debe estar liso y sin huecos en la parte interior o exterior para que la flauta tenga un sonido adecuado.

Retira las ramas del bambú. De ser necesario, utiliza una sierra de arco. Además, debes lijar cualquier protuberancia que quede en los puntos en que las cortaste. Si tienes una lijadora manual, utilízala para llevar a cabo esta tarea pues es mucho más rápido y fácil que hacerlo a mano. 

• Es posible que el pedazo de bambú que selecciones tenga varios nudos. Si es largo, escoge la parte con la que vas a trabajar y líjala, de modo que no lo hagas innecesariamente con todo el bambú. 

Corta el tubo del tamaño que quieras en base al tono. Su longitud determinará el tono en que tocará la flauta. Para que esta suene en A, corta un tubo de 35,5 cm (14 pulgadas); para que toque en F, que tenga 45,7 cm (18 pulgadas); y para que suene en D, córtalo de 53 cm (21 pulgadas). Elige una sección de bambú que tenga los nudos separados el uno del otro casi por la mitad de la longitud total del instrumento. 

• Por ejemplo, si quieres una flauta de 35,5 cm (14 pulgadas), los nudos deben estar a un poco más de 17,5 cm (7 pulgadas) de distancia el uno del otro. En otras palabras, debe quedar un espacio de 17,5 cm (7 pulgadas) entre cada nudo. 
• El objetivo es cortarlo de modo que quede un nudo al final y otro más o menos al medio. Cuando lo cortes del tamaño que quieras, debe haber un nudo en uno de los extremos y el otro aproximadamente en el centro. Como mínimo debe tener uno. 
• Envuelve con un pedazo de cinta de enmascarar el área que quieres cortar y hazlo con una sierra de arco. La cinta ayudará a que el bambú no se astille. 
• Corta al lado del nudo, no sobre él. 

Selecciona el nudo que se convertirá en el corcho. Para ello, escoge la parte del tubo de bambú que tiene el nudo cerca del extremo. Después, mide 2 cm (0,78 pulgadas) a partir de él y marca el punto con un lápiz. A esta área se le conocerá como el corcho de la flauta. El orificio de soplado, al que formalmente se le llama embocadura, no quedará lejos de él. No cortes en este lugar. 
 

• Revisa el nudo que hayas seleccionado como tu corcho para ver si tiene agujeros. Si los tiene, es posible que el sonido de la flauta no sea adecuado. 

Quita los nudos sólidos. Como se mencionó anteriormente, la parte interior de los nudos es sólida y no hueca como el resto del tubo. Por lo tanto, tendrás que sacar todos los nudos excepto por el que está cerca del extremo que funciona como corcho. Puedes utilizar un martillo y un cincel para este propósito. Pon el cincel o cualquier herramienta puntiaguda contra el nudo, en el interior del tubo, y golpea su cabeza con un martillo. Poco a poco lo quitarás con ayuda del cincel.

• Otra opción es sacar los nudos con un atizador, pero probablemente lo más seguro es desgastarlos con una broca de taladro larga.

Limpia la parte interior de la flauta. Envuelve una varilla de madera de 50 cm (20 pulgadas) de largo con papel de lija y sujétalo con cinta adhesiva. Después, frótalo contra la parte interna del bambú, hasta que esta quede uniforme. Asimismo, lija los lugares en los que se ubicaban los nudos para que estén lo más uniformes posibles.

Mide el grosor de las paredes. Ahora que tienes el bambú abierto, podrás ver el grosor de las paredes, que tendrás que saber para calcular el diámetro de la embocadura, que, como ya se mencionó, es el lugar por donde se sopla. Con una regla mide cada una aproximando las medidas en milímetros y anótalas. Guárdalas para más adelante.

Mide el lugar exacto donde estará la embocadura. Esta debe ubicarse a un diámetro más arriba del corcho, el nudo que seleccionaste al extremo del bambú. Por ejemplo, si el ancho o diámetro del tubo es de 8 cm (3,1 pulgadas), tendrás que medir esta distancia hacia arriba del corcho. Luego marca el punto y este será el lugar donde se ubique el centro del orificio de soplado.

• El diámetro es la longitud del círculo.

Calcula el diámetro de la embocadura. En este momento necesitas saber el ancho que debes darle al orificio de soplado pues esta medida afectará el sonido de la flauta. Utiliza un calculador para este instrumento, como Flutomat, para que te calcule la medida adecuada.

• Ingresa las medidas del diámetro interno de la flauta y del grosor de las paredes. Después elige el tono en que quieres que esté el instrumento. Si la cortaste de un largo específico para un tono en particular, puedes saltarte este paso. La aplicación calculará el diámetro de la embocadura y de los otros siete agujeros de la escala occidental de siete notas. Anota los diámetros de cada agujero.
• Por ejemplo, supongamos que el diámetro del orificio de soplado es 10 mm (0,39 pulgadas), entonces, de acuerdo al calculador, el diámetro de los siete agujeros siguientes para los dedos podría ser 8 mm (0,31 pulgadas), 8,5 mm (0,33), 9 mm (0,35 pulgadas), 7 mm (0,27 pulgadas), 9,5 mm (0,37 pulgadas), 10 mm (0,39) y 5,5 mm (0,21 pulgadas).

Mide la distancia entre los agujeros de los dedos. Utiliza el calculador que también determina el espacio entre el borde de cada agujero y el extremo abierto de la flauta. Este te proporcionará las medidas en base a la distancia de cada agujero de la embocadura. Marca el lugar donde estará cada uno para asegurarte de que quepan en el tubo. Una vez que todas las medidas estén correctas y entren en él, estarás listo para taladrar.

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