Formulación de un proyecto de mejoramiento educativo

Formulación de un proyecto de mejoramiento educativo

 Identificación del Proyecto

• Nombre : Rincones en Acción

• Establecimiento : Colegio Rauquen Curicó

• Nivel : Primer y Segundo Nivel de transición

• Educadores : Florencia Oyarce

Marcela Tapia

 Diagnostico y problema principal

A raíz de lo observado en las instancias de practica hemos llegado a la conclusión de que la falta de recursos materiales y espacios educativos no permite un desarrollo integral de los niños y niñas es por este motivo que hemos detectado la necesidad de implementar rincones al interior del aula de actividades.

 Justificación del proyecto

El Colegio Rauquen ubicado en la Ciudad de Curicó actualmente se encuentra implementando en los niveles de transición el currículo integral. Luego de las observaciones realizadas y de contrastarla con la bibliografía, nos hemos podido dar cuenta que existen varios puntos sobre esta modalidad que se encuentran ausentes por lo menos en el nivel en el que me encuentro desarrollando mi práctica VI.

Si bien su fundamento indica que se basa en la integración de varios planteamientos teóricos de diferentes posturas filosóficas, psicológicas y pedagógicas enfatizando que el proceso educativo debe tomar en cuenta los diversos aspectos y áreas de desarrollo del niño o la niña, tendiendo a lograr objetivos integrales que satisfagan sus necesidades psicobiológicas, socio afectivas, psicomotrices, etc., cabe destacar que en el aula no se ven reflejados todas estas áreas cubiertas. Para comenzar se debe señalar que el aula no se encuentra organizada en rincones. Al exterior tampoco se pueden encontrar. Los niños y niñas no cuentan con el material necesario para crear, explorar y construir conocimientos.

Como ya sabemos la metodología del Currículo Integral está basada en el juego, ya que este constituye una actividad fundamental en el párvulo. No se puede estimular integralmente a un niño, sino se le brinda la oportunidad de involucrarse plenamente en la realización de sus actividades. “El juego ofrece una variedad de oportunidades de involucrarse plenamente en la realización de sus actividades”. (Peralta, M: 2002, pág. 25) Durante las instancia que hemos podido observar el juego permanece aislado dentro de la jornada de hecho ocupa un lugar secundario dentro de las experiencias y actividades, durante la instancia de patio no se ve reflejado, el juego de reglas que pudiese y debería al menos en un comienzo estar intencionado por el adulto a cargo, sin embargo los niños y niñas se ven actuando libres muchas veces sin un objetivo claro. Si bien es cierto no estamos en desacuerdo que los niños y niñas deben ser libres en su quehacer, tampoco podemos desconocer que si estamos frente a una modalidad curricular como la de este tipo como futuras educadoras de párvulo debemos propiciar que se cumplan los objetivos básicos, y creo yo que estamos frente a una carencia importante de material, y esto repercute en los niños y niñas.

Por otra parte reiteramos que las aulas no están organizadas en rincones esto hace privarse a los niños y niñas de oportunidades de desarrollar su creatividad a través de la elección de material y manipulación de estos. Estas actividades son iniciadas por los niños y niñas por lo tanto ellos mismos crean y se fijan sus propios objetivos. Sin embargo esto no ocurre en el nivel.

Como futuras educadoras creemos que se debiera establecer una reunión tecnica con las demás educadoras del establecimiento y discutir sobre la implementación de materiales en las aulas y los patios tanto exteriores como interiores, de esta manera los niños y niñas aprenderán de una manera más lúdica, libre y responsable. Es sumamente importante que nosotras como futuras educadoras nos demos cuenta de este tipo de falencias en los establecimientos educacionales, a la vez considero que debemos estar preparadas para intervenir en este tipo de problemáticas con ideas concretas, trabajarlas con el grupo de educadoras y llevar a cabo una propuesta que cambie la situación. No debemos olvidar que dentro de nuestra área el juego es fundamental y a partir del se generan muchos conocimientos significativos que salen de la hoja de papel.

Sobre la base del currículo integral se encuentran los principios pedagógicos en los cuales se sustenta, de ellos existen dos que se orientan particularmente al Educador. Uno hace mención a la flexibilidad; de mantenerse flexible ante los intereses que surjan de los niños y niñas, estos se deben considerar dentro de las experiencias y actividades a desarrollar. Sin embargo no e evidenciado que esto se cumpla, por el contrario me he visto frente a un educador que decide por si solo que contenidos y que metodología utilizar olvidando muchas veces las características de los niños y niñas y sus intereses personales y grupales. Eso habla probablemente de un educador que responde quizás a las exigencias del colegio pero no a la de los niños y niñas. Muchas veces cuando egresamos perdimos nuestros objetivos, el rumbo y hasta la ética. De nosotras depende seguir adelante impartiendo una educación que no queremos. Debemos aprender a escuchar la voz de los niños porque nos dicen mucho y a veces por no escuchar volvemos a lo mismo de siempre trabajando de la misma forma olvidando que ellos son capaces de mucho mas. (CERDA, L: 2006)

El otro hace mención al equilibro dentro de la jornada. Debemos ser capaces de integrar diferentes actividades donde se les enseñe a los niños y niñas pero no solo con papel y lápiz, ellos deben también mover su cuerpo y explorar el mundo, conocer nuevas temas utilizando herramientas y materiales novedosos que aumenten su curiosidad y el deseo de aprender. Lamentablemente en el aula se ve un aprendizaje conductista en donde son más importantes los libros cuadernos y las laminas.

 Reseña bibliográfica sobre la organización del tiempo y la organización de la jornada del el currículo Integral.

La organización del tiempo en el currículo integral, favorece el tiempo la participación y comunicación del niño y la niña. Se postula una organización del tiempo flexible, de acuerdo a las necesidades e intereses de los párvulos. En la tarea educativa está permite al educador programar minuciosamente los periodos de la jornada cautelando que estos se den en forma graduada y equilibrada del tal modo que facilite la distribución del tiempo del niño y del educador.

La flexibilidad no quiere decir improvisación por el contrario, la facultad de la educadora de descartar, modificar, incorporar o prolongar determinadas acciones, puede ser ejercida por estas cuando las circunstancias así lo requieran. De acuerdo a lo anterior el tiempo debe

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