Gráficas Cóndor
Enviado por danifuela • 8 de Noviembre de 2012 • Trabajo • 4.903 Palabras (20 Páginas) • 354 Visitas
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Asesores para la sección latina: JOSÉ JAVIER ISO y JOSÉ LUIS MORALEJO.
Según las normas de la B. C. G., la traducción de este volumen ha sido revisada por JOSÉ ANTONIO
ENRÍQUEZ GONZÁLEZ.
© EDITORIAL GREDOS, S. A.
Sánchez Pacheco, 81, Madrid, 1996.
Depósito Legal: M. 9221-1996.
ISBN 84-249-1497-X. Obra completa.
ISBN 84-249-1801-0. Tomo II.
Impreso en España. Printed in Spain.
Gráficas Cóndor, S. A., Sánchez Pacheco, 81, Madrid, 1996.-6800. Tito Macio Plauto E l m i l i t a r f a n f a r r ó n 2
EL MILITAR FANFARRÓN
(Miles gloriosus)
INTRODUCCIÓN
El Miles gloriosus es una de las comedias de más éxito de Plauto, sea cual sea su relación con el
original griego, del que no se conoce más que el título, Alazón
1
, por noticia del prólogo, y haya o no
haya contaminado el poeta, cuestiones ambas tan traídas y llevadas por la crítica
2
. Se suele atribuir
el Miles a la primera época de la actividad del autor, a causa de su pobreza de ritmos, al igual que el
Mercator; por una alusión al encarcelamiento del poeta Nevio (v. 211 y sigs.), habría que datar la
obra hacia el 205 antes de nuestra era. Así y todo, no se puede dejar de reconocer que el Miles
supone uno de los puntos más altos de toda la obra del poeta; es una obra plautina cien por cien, una
obra en que el autor se supera a sí mismo en cuanto a efectos cómicos, una pieza que no es posible
leer, y menos aún ver representada, sin reír casi continuamente a más y mejor.
El argumento no es complicado: durante una ausencia del joven ateniense Pleusicles,
Pirgopolinices, un militar de Éfeso —un Fondottiero tipico del mundo alejandrino, que al frente de
tropas mercenarias ofrecía sus servicios a algún rey— consigue introducirse en casa de la amiga de
Pleusicles, apoderarse de ella y llevársela a la fuerza consigo a Éfeso. Palestrión, esclavo de
Pleusicles, que marcha en busca de su amo para darle cuenta de lo sucedido, es capturado por unos
piratas y entregado como esclavo precisamente al militar de Éfeso. Desde allí escribe a su anterior
amo, que se presenta en Éfeso, alojándose en casa de un amigo de su padre, el viejo
Periplectómeno, que vive precisamente en la casa contigua a la del militar. Un pasadizo abierto
secretamente en la pared medianera entre las dos casas va a ser causa de algunas complicaciones,
pero no impedirá el éxito final: el guardián personal de la joven Filocomasio, Escéledro, la ha visto
besarse con un desconocido en casa del vecino, pero al fin termina por creerse la historia de que se
trata de una hermana gemela de Filocomasio venida de Atenas con su amigo. La próxima víctima
va a ser el militar en persona. Periplectómeno, el viejo vecino, le busca a Palestrión dos jóvenes,
una de las cuales se hace pasar por esposa del viejo, mientras la otra, su esclava, hará de
intermediaria para llevar al militar el mensaje de su ama, perdidamente enamorada de él. El militar
cae en la trampa, despide a Filocomasio, a la que en nombre de su supuesta hermana y de su madre
se presenta a recoger Pleusicles, bajo disfraz de patrón de navío, y acude a casa de Periplectómeno
en busca de la que piensa va a ser su nuevo amor; en realidad le esperan allí el viejo y sus esclavos
convenientemente armados, y sólo a duras penas consigue escapar al merecido castigo, mientras
Filocomasio, Pleusicles y Palestrión navegan rumbo a Atenas.
Como cobertura a la pieza sirve una escena insuperable de presentación del militar en diálogo
con su gorrón Artotrogo, personaje protático que no vuelve a aparecer luego en el curso de la obra.
A continuación va el prólogo, en boca del esclavo Palestrión (hasta el v. 155). El militar desaparece
hasta el v. 947. Todo este espacio está reservado a los diversos preparativos para cogerle en la
trampa —con una especie de excurso sobre la persona del viejo Periplectómeno en los vv. 596-
764—. Una vez bien delineado el plan, puede volver a aparecer el militar en escena (v. 946 hasta el
final, v. 1437). Si bien el largo excurso parece salirse hasta cierto punto de lo que en sí pide el
argumento de la obra, en los 500 versos finales queda el público bien compensado del intermedio:
1
Según K. GAISER, 1959, el Ephesios de MENANDRO.
2
Q. ZWIERLEIN, 1991, atribuye las irregularidades en la composición del Miles a un reelaborador negando la
autenticidad de un total de 340 versos. Tito Macio Plauto E l m i l i t a r f a n f a r r ó n 3
la comicidad de lo que sigue es tal, que ni los mismos personajes pueden contener la risa, cuánto
menos, naturalmente, los espectadores —¿quizá se trata de una condescendencia del poeta con los
actores, no fuera que empezaran a reír a destiempo en escena juntamente con el público?—.
El efecto cómico queda conseguido de manera total, y eso a pesar de la técnica especial de
presentar la acción, que en sí va doblemente ofrecida: los personajes deliberan ante el público sobre
su plan, Palestrión instruye a los otros personajes de lo que han de hacer —se trata más o menos de
una narración—, y a ello sigue luego su realización en forma dramática en la ficción de la escena. Y
a pesar de tales reiteraciones. es tan perfecto el juego de los recursos cómico— dramáticos, que,
como se acaba de decir, ni los mismos personajes pueden contener la risa.
Las diversas figuras típicas de la comedia están aquí trazadas de manera magistral:
Periplectómeno, el viejo jovial y comprensivo; Pleusicles, el joven galán, esta vez con rasgos aún
más acentuados de timidez, apocado, escrupuloso, lleno de miramientos, se diría que en la luna
(piénsese en su monólogo de los vv. 1284-1297, cuando aparece disfrazado de patrón de navío para
recoger a Filocomasio y empieza —en momentos tan inoportunos, de tanto peligro— a discurrir
sobre la calidad moral de su manera de proceder y hasta a perderse en consideraciones
mitológicas... —un o de los momentos de más refinada t omicidad de la pieza—, hasta que el ver a
Palestrión y al militar le hace caer en la cuenta de que no es ocasión para ello). ¿Y el tipo del militar
...