HISTORIA DEL TERRITORIO

2.1 HISTORIA DEL TERRITORIO NACIONAL

A la llegada de los españoles, el territorio mexicano estaba ocupado por grupos indígenas perfectamente organizados, los cuales libraban luchas internas, principalmente por el control de las vías de comunicación, así como para someter a los menos poderosos y obtener tributo.

Tanto en la zona Mesoamericana, como la situada al norte conocida como Aridoamérica, las distintas civilizaciones prehispánicas dominaban grandes extensiones del territorio. El más poderoso fue el imperio Azteca, creado y fortalecido por los Mexicas, que ocupaban el centro del país y se encontraban en plena expansión cuando los españoles llegaron a América.

Con la conquista y posterior colonización de México cambio de manera radical, aunque no inmediata, las dimensiones y formas del territorio. Al inicio de la ocupación los conquistadores, no reconocieron, límite alguno, excepto los que les imponía su capacidad de controlar áreas inmensas.

Después de 30 años de la caída de Tenochtitlán, los colonizadores europeos no habían logrado rebasar los límites de Mesoamérica hacia el norte. La zona septentrional del país comenzó a colonizarse desde el sur del altiplanicie mexicana cubriendo las superficies que hoy comprenden los estados de Durango, Zacatecas y el sur de Coahuila.

En la segunda mitad del siglo XVII se logró establecer un corredor por el actual estado de Chihuahua hacia los territorios de Nuevo México donde los misioneros religiosos jugaron un papel muy importante. Para el siglo XVIII, quedaba relativamente poco por conocer de lo que es actualmente México. Hacia el sur se había dominado ya la región del Soconusco (Chiapas) y Guatemala, y en poco tiempo se controlaron territorios centroamericanos prácticamente, hasta los confines actuales de Guatemala y Nicaragua.

Esto quiere decir que la Nueva España llegó a tener amplio territorio en el norte, y hasta las regiones centroamericanas, fue así que tuvo que conformar grandes divisiones territoriales, las primeras son las conocidas como provincias, audiencias y corregimientos. La primera gran Audiencia se estableció en la Nueva España hasta 1543 y cubrió toda Mesoamérica. En ese año los españoles hicieron una importante división; se creó la audiencia “Cancillería Real de Santiago de Guatemala” y cinco años después la de “Guadalajara de la Galicia en la Nueva España”, ambas con una extensión indefinida, por ejemplo a la Guatemala se le adjudicaron los territorios de Yucatán, Cozumel y Chiapas; sin embargo estas primeras divisiones no tuvieron delimitaciones muy claras.

A fines de la colonia, los Españoles tenían un control relativo sobre bastas regiones que presentaban, además, una división política muy complicada y poco precisa, aunque con ella habían logrado mantener y acrecentar su poderío. Esta misma división se mantuvo durante los primero años del México Independiente.

2.2 EVOLUCIÓN HISTÓRICA DEL TERRITORIO MEXICANO.

Para algunos historiadores el primer territorio del estado Mexicano, corresponde con la máxima extensión del llamado Imperio Mexica del cual deriva su nombre, en cualquier caso ese territorio abarcaba la totalidad del territorio existente en el inicio del siglo XXI, alcanzando las costas del océano Pacifico y el Golfo de México.

La Nueva España fue divida para lograr una mejor administración, con la Real Audiencia de 1543, que creó la Cancillería de Guatemala. En 1548 se creó la Real Audiencia de Guadalajara con lo cual la Nueva España quedo dividida en dos grandes reinos uno llamado Reino de Galicia y el otro como Reino de México que llego a comprender más o menos los actuales estados de México, Guerrero, Puebla, Michoacán, Hidalgo, Tlaxcala, Querétaro, parte de Jalisco y el Distrito Federal. En algún momento comprendió también Oaxaca pero por su lejanía tuvo de hecho una vida totalmente independiente.

Durante este periodo su capital fue la ciudad de México, donde residía el Virrey, la Real Audiencia de México, el Cardenal Primado de México y hasta el Marques del Valle de Oaxaca en su momento. Asimismo, el territorio se subdividía en Corregimientos, y Alcaldías, a los cuales no se les asignó un territorio en si, por eso es muy común encontrar que los limites se traslapaban, incluso se nombran los reinos o provincias de México, Tlaxcala y Michoacán en muchos documentos de la época. Hacia 1600 se había organizado mejor el territorio de la Nueva España, por lo que se divide en 23 Provincias Mayores.

En 1786 por ley el monarca español Carlos III introdujo en la Nueva España el sistema administrativo de Intendencias de Ejercito y Provincias en el Reino de Nueva España, que se había ejercido desde 1716 en Europa, dividiendo el territorio de la Nueva España en doce intendencias renombrándose el Reino de México.

2.3 LA CONQUISTA DEL TERRITORIO DE MESOAMÉRICA.

La conquista y colonización de América se refiere al proceso histórico por el cual diversas potencias europeas conquistaron y establecieron sistemas de dominación colonial en el continente americano, desde finales del siglo XV hasta el siglo XIX. Este proceso implicó la desaparición de los grandes imperios americanos, particularmente el Imperio inca y el Imperio azteca, así como el colapso demográfico de la población americana.

En contraposición de otros colonizadores a lo largo de la historia como ingleses, portugueses u holandeses, los colonizadores españoles desde un primer momento aceptaron a los indígenas como personas dotadas de alma y por ello centraron parte de su esfuerzo en adoctrinarles y convertirles a la religión católica.

Los conquistadores, no reconocieron, límite alguno, excepto los que les imponía su capacidad de controlar áreas inmensas.

La conquista tuvo uno de sus hitos más importantes con la derrota de México-Tenochtitlan por parte de las tropas de Hernán Cortés en 1521. El virreinato de Nueva España fue creado oficialmente el 8 de marzo de 1535. Su primer virrey fue Antonio de Mendoza y Pacheco, y la capital del virreinato fue la Ciudad de México establecida sobre la antigua Tenochtitlan.

Hubo otras expediciones y campañas militares, tanto de Hernán Cortés como de sus capitanes, entre 1521 y 1525, en la zona central, norte y sur del territorio de la actual nación mexicana, las cuales fueron estableciendo paulatinamente los límites de la Nueva España. A partir de estos acontecimientos que modificaron

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