Historia Social de la Educación

Historia Social de la Educación

La comunidad primitiva estaba asentada sobre las bases del trabajo en la tierra y estaban unidos por los vínculos familiares, sus miembros eran individuos libres y con derechos iguales. Había determinadas tareas, que sólo algunos miembros del grupo podían realizar, lo que impulsó prematuramente la división del trabajo, de acuerdo con las diferencias entre los sexos, pero no había sometimiento por parte de la mujer. La economía doméstica estaba a cargo de las mujeres, y esto no representaba una práctica privada sino era cuestión socialmente necesaria para poder proporcionar los alimentos a la familia. 

La educación se daba en el seno de la familia, a partir de los siete años el niño acompañaba a los adultos en las tareas cotidianas, y al trabajo en la comunidad, realizaba trabajos físicos y recibía a cambio iguales alimentos que los demás. La convivencia diaria con el adulto y sobre todo con su madre al realizar las tareas cotidianas, le introducía al niño las creencias y las prácticas que su entorno social tenía, sin que este fuera consciente de eso.

El paradigma de conocimiento que se crea en esta etapa de la historia es aprender para vivir o aprender viviendo, o en palabras de A. Ponce “En las comunidades primitivas la enseñanza era para la vida por medio de la vida” . Ya que el niño aprendía en las funciones sociales que mantenían, y no había diferencias con los adultos, esta forma espontánea de aprendizaje en la comunidad primitiva, cambió a medida que la esta comunidad fue transformándose en una sociedad dividida por clases o estamentos. 

Uno de esos cambios se vio con las ceremonias de iniciación constituyen el primer esbozo de un proceso educativo o de instrucción diferenciado, ya que los magos, sacerdotes y los sabios, que se transformaron en dueños del saber, como método de dominación-, van asumiendo de a poco la función primero de consejeros y luego de iniciadores para esos selectos jóvenes de la clase dirigente de esa comunidad. La actividad consistía en explicarles los significados ocultos de los mitos y la esencia de las tradiciones de su comunidad. Ya comenzaba entonces a haber diferencias entre los iniciados y los no iniciados, porque no solo la diferencia entre en cuanto a lo instructivo, sino que no se les proporcionaba la misma cantidad de comida. 

En cuanto a la situación de la mujer en su entorno social, también había cambiado, desde la filiación, que pasó a ser patriarcal, y la ésta pasó, a un segundo plano; donde quedaba sujeta al cuidado de su marido y sus hijos. La mujer ya no estaba en igualdad de derechos, solo cumplía funciones domésticas, no más sociales; tenía la imposición de procrear. La instrucción de la misma, pasaba a ser apenas superior a la de un niño. Esta familia patriarcal se organiza sobre las bases de un modo de producción que comienza a tener propiedad privada.

Siguiendo los lineamientos de la transición de la comunidad primitiva, a la sociedad antigua, la educación era impuesta por las clases dominantes, y ésta tiene en cuenta la coyuntura económico social; el trabajo no solo consistía en el labrado de los campos, sino que comenzaba a tomar protagonismo el comercio, y con ello los sectores más pequeños, como los comerciantes y artesanos, luego del siglo IV, comienzan a tener algo de participación en la sociedad. En las polis de Atenas y Esparta la educación hace hincapié en preparar a la clase dirigente. 

Ponce, plantea que la educación para ser eficaz tenía que tener tres aspectos: la primera destruir restos de alguna tradición enemiga; segundo, consolidar y ampliar su propia es situación como clase dominante; y tercero, prevenir los comienzos de una posible rebelión. 

En cuanto al plano de la educación la clase dominante, no pretende que la educación sea para todos, sino que pretende que esas clases bajas acepten su condición de desigualdad, que le fue impuesta de forma natural, de la cual no tenía forma de escapar. 

A partir del siglo VII a.C., se hacía más fuerte el comercio, por encima del agrícola, pero esta actividad no deja de ser una base importante, del mantenimiento de las ciudades, y de la clase ociosa. Por conveniencia de las clases dominantes esta labor le era encomendada a los esclavos y extranjeros, de esta manera se desligaba de las tareas manuales y el intercambio de productos. Ya que para ellos eran socialmente improductivas. 

El Estado espartano era militarista y de explotación agrícola. Esta basa su poder en la fuerza militar y en la oligarquía, de esta manera se obligaba a tributar a la gran masa campesina. La funcionalidad de la educación espartana estaba enfocada en la formación de guerreros, por lo que orientaban el estudio: en los valores, el respeto por las leyes patrias, y por sobre todo por el desarrollo de la fortaleza física, a través del ejercicio y el deporte. 

La educación del niño estaba a cargo de la familia, pero el Estado a los 7 años de edad se hacía cargo de ese niño, y hasta los 40 años podía permanecer en el ejército, y en algunos casos hasta los 60 años como reserva. Las mujeres también formaban parte de esta instrucción militarizada, y hasta el momento gozaba de no estar en un nivel inferior al del varón. (Hasta entonces no había monogamia, ya que varios hermanos podían compartir una misma esposa, la causa era meramente economía, de esta forma se conservaba el patrimonio familiar).

Esta instrucción militar, que se daba estaba bajo el yugo de la severidad y crueldad para endurecer a los futuros soldados. El fin que tenía esta educación, era asegurar la superioridad militar ante el enemigo, y ante las clases dominadas, el resultado de esta educación eran hombres crueles, brutales “salvajes” y capaces de someter a quien considerasen inferior.

Además de esta formación, existía la enseñanza elemental donde se enseñaba a leer, escribir y luego se incorpora la música, el arte y la filosofía sin dejar la enseñanza militar. Para Aristóteles el comercio era una ocupación antinatural, pero podía admitirlo hasta cierto límite (en su ciudad ideal), la base económica de estas ciudades de la antigüedad era el esclavismo, y lo justifica diciendo que hay clases que nacieron para gobernar <<clase militar, magistrado, sacerdocio y estadistas>>, y otras para ser gobernados <<agricultores, artesanos y campesinos>>, además de que muchas gentes eran esclavas por naturaleza; “… como ocurre con aquellos cuya actividad sea el uso de su cuerpo – y que esto sea lo mejor que saben hacer – son por naturaleza esclavos, para los cuales lo más conveniente es como en los casos citados, ser gobernados por sus dueños”.  Tanto para Aristóteles como para Platón, el trabajo esclavo aseguraba a la condición de esa clase gobernante, ya que no podían trabajar y conducir a la sociedad, “En la ciudad mejor gobernada y que verdaderamente posee hombres justos, los ciudadanos no deben llevar una vida de artesanos ni de mercader, porque tal genero de vida carece de nobleza y es contrario a la virtud. Tampoco deben ser labradores los que han de ser ciudadanos, porque tanto para que se origine la virtud como para las actividades políticas es indispensable el ocio.”

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