Historia de los Medios.

Universidad "Fermín Toro".

                Escuela de Comunicación Social.

INFORME

Autora: Michell Moreno.

Cédula: 24.418.662

Sección: T-721.

Prof.: Lcda. Yasmina Hera.

Cátedra: Historia de los Medios.

Barquisimeto, 29 de Enero de 2016.

INTRODUCCIÓN

A través de la historia, el hombre ha venido buscando diversas formas para poder plasmar aquellos objetos, personas, situaciones u otras cosas llamativas que se han presentado en su entorno; creando distintos modelos que parten principalmente del dibujo, la pintura y la escultura, lo cual, con el pasar del tiempo fue estudiado hasta ser convertido en fotografía, siendo este el método más directo, y efectivo hasta la actualidad, para mantener presente un registro sobre lo ocurrido en algunas ocasiones.

Es necesario resaltar que la fotografía nace de la experiencia de los dibujantes, los cuales, buscaron durante años, una manera de facilitar su trabajo y hacerlo más realista; este hecho lleva al descubrimiento de algunas sustancias son sensibles a la luz. Sin embargo, este fenómeno vino siendo estudiado desde antes de Cristo, partiendo con la teoría de la luz, hasta irse desarrollando y conociendo a través de los años para culminar en una de las creaciones más efectivas y desarrolladas hasta la actualidad.

DESARROLLO

El paso principal para el descubrimiento y creación de la fotografía fueron los estudios realizados por Aristóteles (384 a.C. – 322 a.C.), en los cuales no solo observó la luz, sino que creó también la llamada “Teoría de la Luz”, en la que postuló que los fotones se trasladaban en línea recta y movimientos ondulatorios. En ese entonces (Antes de Cristo), tanto Euclides como Aristóteles escribieron acerca de las cámaras estenopeicas, sin embargo, no le daban este nombre a dicho fenómeno, pues la proyección de imágenes ocurría naturalmente cuando la luz pasaba a través de tejidos o entretejidos de hojas.

En el siglo V a.C., el filósofo Mo Jing menciona la teoría de una "Imagen que se forma a través de un pequeño orificio". Por otra parte, una de las paradojas más importantes en la historia de la fotografía tuvo lugar en el siglo VI d. C., cuando el alquimista árabe Abd-el-Kamir descubrió una emulsión fotosensible, no obstante, nunca la aplicó a la cámara oscura, debido a que no tenía conocimiento de la misma. Por su parte, el mago Merlín (539 d.C.), utilizaba la cámara oscura con fines estratégicos y de observación en la guerra que sostuvo el rey Arturo contra los sajones.

Más tarde, Shen Kuo (1031-1095) experimentó con la cámara oscura, siendo el primero en proveer sus atributos geométricos y cuantitativos. Sin embargo, fue Ibn Al-Haytham quien estudió los rayos producidos por el sol y la luna; haciéndolos pasar a través de un orificio por el que entraba la luz a una habitación oscura, para producir una imagen en la pared opuesta. De esta manera, realizó la primera cámara oscura logrando inventar con el tiempo la cámara estenopeica e irla mejorando, al notar que mientras más pequeño era el agujero de la misma, más nítida era la imagen proyectada.

En la segunda mitad del siglo XV, se volvieron a tener noticias acerca de la cámara oscura, a través de Leonardo Da Vinci, quien redescubrió su funcionamiento y le adjudicó una utilidad práctica; por lo que es a él a quien se otorga el crédito de su descubrimiento. El italiano Da Vinci y el alemán Alberto Durero emplearon la cámara oscura para dibujar los objetos que en ella se reflejaban. A partir de ese momento se utilizó como herramienta auxiliar del dibujo y la pintura, extendiéndose rápidamente en Europa. En el siglo XVI el físico Napolitano, Giovanni Battista Della Porta, antepuso al orificio una lente biconvexa (lupa) obteniendo mayor nitidez y luminosidad en la imagen.

Posteriormente, Joseph Niépce en 1813, comienza a realizar una serie de experimentos junto con su hijo Isidore  Niépce y Louis Daguerre, con el fin de obtener imágenes fijas en algún material; su primer éxito en la obtención de medio sensible a la luz vino con el uso de asfalto disuelto en aceite. Luego, tuvo la idea de emplear una cámara oscura junto con las sales de plata sensibles a la luz, para tratar de fijar imágenes. En este entonces, comenzó utilizando la piedra como soporte para fijar las imágenes, continuando con el papel, el cristal, y por último, con diversos metales como el estaño, el cobre y el peltre.

Cabe a destacar, que en 1816 Niépce, obtuvo las primeras imágenes fotográficas de la historia, sin embargo, logró obtener únicamente el negativo; para el año 1818, sacrificó las posibilidades de reproducción de las imágenes, consiguiendo imágenes únicas, directamente en positivo. Sin embargo, este descubrimiento fue público en 1839 (A 6 años de su muerte), gracias a Louis Daguerre, quien utilizó placas de cobre tratadas con yodo, expuestas en una cámara de madera, para obtener una imagen poco visible; creándose así el daguerrotipo.

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