INCONSCIENCIA AMBIENTAL EN LA CIUDAD

INCONSCIENCIA AMBIENTAL EN LA CIUDAD

Hoy voy a hablar de un tema que es de interés general de la sociedad, en la cual nuestras autoridades hacen caso omiso a este problema; pero es inevitable comenzar formulándonos las siguientes preguntas: ¿En qué clase de ciudad vivimos? ¿Reúne Iquitos las cualidades esenciales, los elementos indispensables, para ser catalogada como una de las ciudades más bellas del mundo? ¿Es o no es una ciudad con ciudadanos que puedan tener conciencia con respecto al recojo o manejo de sus desperdicios? En los 149 años de vida oficial que tiene nuestra majestuosa ciudad de Iquitos ¿Los gobiernos locales se han preocupado acaso de estructurar un Plan de contingencia en la cual luche y erradique este problema? Las respuestas pueden ser variadas y hasta contradictorias.

La problemática que a traviesa hoy en día nuestra ciudad es debida principalmente la falta de conciencia ambiental por parte de sus habitantes, que a diario arrojan sus desperdicios en las calles, producto de todo ello se debe a que muchas personas están acostumbradas a no arrojar su basura a la hora que pasa el carro recolector; otro papel importante que engloba este tema es la falta de educación y concientización. Es triste y hasta indignante ver que hasta ahora existen muchas personas que arrojan sus desperdicios en la calles sin importarle lo grave que es para el ambiente y para ellos mismos. Hoy en día los gobiernos locales se han olvidado totalmente del cuidado y preservación del medio ambiente, al ver en cada esquina de una calle inmensos montículos de basura que no fueron recogidos en su debido momento. Es preponderante mencionar que son pocas las oportunidades en las cuales los municipios realizan campañas sobre el manejo de residuos sólidos en los hogares. Así mismo la falta de cultura ambiental que posee nuestra población permite que estos índices o niveles de basura que observamos a diario en nuestra ciudad crezcan cada vez más.

En conclusión para erradicar esta problemática los gobiernos locales deben promover o gestionar campañas sobre el adecuado manejo o uso de residuos sólidos, educar a la población que el arrojar basura en las calles genera enormes focos de enfermedad que hasta podrían llevarlos a la muerte. Y multar con enormes sumas a aquellas personas que arrojan basura en lugares no autorizados.

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