La Danza
Enviado por ismary90 • 29 de Mayo de 2014 • Trabajo • 1.954 Palabras (8 Páginas) • 348 Visitas
INTRODUCCIÓN
La danza es la madre de todas las artes, la música y la poesía existen en el tiempo; la pintura y la escultura en el espacio. Pero la danza vive en el tiempo y el espacio" con estas palabras inicia curt sachs su tratado sobre danza. No se pudo escoger palabras más elocuentes para demostrar la importancia que la expresividad de los sentimientos a través de movimientos corporales estéticos y coordinados tiene y han tenido en todos los tiempos para el ser humano.
En esto está implícita la definición técnica de danza, "es la forma de expresar un sentimiento a través de movimientos corporales estéticos y coordinados a un ritmo", pudiendo, el ritmo ser representado mediante sonidos realizados por instrumentos u objetos o simplemente (que resulta lo más difícil) por movimientos sin ningún sonido. Existen muchas actividades humanas que son ejecutadas por movimientos corporales y además con un "ritmo".
El ser humano danza porque tiene necesidad de expresar lo que siente, alegría, miedo, danza a lo desconocido, a lo que no puede explicar, o simplemente danza por inercia, por un impulso vital.
La danza utiliza el movimiento como medio expresivo. La belleza de los movimientos, tanto individuales como en los conjuntos, se dan por medio de una armonía que se respalda con exclusividad en la simetría y el equilibrio. Un movimiento será bello o no, en realidad con la finalidad expresiva, y con la veracidad de respuesta dada al sentimiento que la origina.
“La vida es sólo un ritmo, el del corazón: La danza es inseparable del ritmo, y ella traduce nuestra existencia, en la medida en que ella expresa todos los ritmos, todas las pulsaciones humanas” (Mariela Ferreira)
Metodología utilizada para la Danza
El análisis de la literatura sobre la enseñanza de la danza nos indica que existen pocas investigaciones sobre este tema, encontrándose fundamentalmente textos en los que se dan sugerencias metodológicas.
No obstante, a continuación se ofrecen estudios sobre la metodología utilizada para la enseñanza de la misma.
En las clases de danza se han utilizado habitualmente técnicas de enseñanza tradicionales, de reproducción de modelos o imitación (Cadopi y Bonnery, 1990; Colomberotto, 1989; Cuéllar, Delgado y Delgado, 1996c; Goutel y Cambet, 1992; Gray, 1989; Gray, 1989; 1983a; Lord y Petiot, 1987; Monteiro, 1988; Tousignant et al., 1992; Werner et al., 1992; Piéron y Delmelle, 1983; Piéron y Georis, 1983).
Gibbons (1996) denuncia que E.E. Mando Directo es el único que se utiliza en la mayoría de las clases de danza. Esta autora argumenta que la principal razón de esta ausencia se debe a la carencia de conocimiento pedagógico por parte del profesorado de danza que hace que la enseñanza pase inadvertida, propiciando que no se cuestione ni el contenido ni el método de las mismas. Para ella, las razones para usar el Continuo de E.E. son numerosas:
• El alumnado proviene de diferentes ámbitos culturales, tiene diversas necesidades y objetivos y aprende de forma diferente.
• El profesorado puede beneficiarse y expandirse más allá de un estilo simple e idiosincrásico, a fin de enseñar experiencias nuevas que propiciaran una mayor efectividad en los estudiantes.
• Los objetivos en el currículo de danza pueden incluir adquisiciones de habilidades, sensibilidad estética, procesos artísticos y razonamientos cognitivos.
• El Continuo provee un esqueleto integrado y comprehensivo que puede beneficiar a los educadores en cualquier tema.
• Los estudiantes pueden aprender a convertirse en activos alumnos/as que toman la iniciativa en analizar, preguntar y desarrollar alternativas.
El énfasis se debe poner sobre una enseñanza-aprendizaje deliberada y no inadvertida. Todo el mundo posee la habilidad de reproducir ideas y movimiento existentes, de producir nuevas ideas o movimientos, y todo sujeto contiene aspectos que pueden ser enseñados por métodos que inviten a la replicación o a la creatividad.
En un estudio realizado por Lord, Chayer y Choquette (1990) se deduce que se utilizan estilos directivos para la presentación de tareas técnicas de danza a estudiantes principiantes. Delporte (1985) en un artículo en el que se estudia la enseñanza de la danza folclórica en clases de E.F. apunta que la metodología más usual es la imitación de un modelo, mientras que los contenidos conceptuales son escasos.
Zakrajsek, Johnson y Walter (1984) comparan también los Estilos de Enseñanza que se utilizan en E.F. y danza. En este estudio intervienen 167 sujetos de 9 universidades, analizándose el nivel de abstracción o concretización de cada actividad. No se encontraron diferencias significativas entre Estilos de Enseñanza ni entre sexos.
Aparentemente los profesores de baile no se han cuestionado las limitaciones de la aplicación de estos modelos demasiado directivos, pero se ha constatado un sentimiento de frustración ante la dificultad para conseguir algunos objetivos tales como desarrollar el sentido de la responsabilidad e iniciativa del alumnado. Este planteamiento resulta razonable en el ámbito profesional y de bailarines/as de élite, pero no tanto para una aplicación educativa. Además, este método no resulta adecuado cuando se aplica indistintamente a distintos estilos de danza, estudios, clases y oportunidades de enseñanza (Gray, 1989). Una investigación realizada con objeto de caracterizar el proceso de enseñanza-aprendizaje utilizado en la enseñanza de la danza y mejorar la conciencia del profesorado en cuanto a las estrategias de enseñanza con los fines y objetivos perseguidos , dio como resultado que se deberían propiciar la toma de iniciativas y desarrollo de la observación y espíritu crítico en los estudiantes mediante una metodología más participativa que favorezca la responsabilidad de los mismos ( Tousignant et al., 1992).
Los postulados de la Didáctica de la Educación Física recomiendan la necesidad de una simultaneidad de los Estilos de Enseñanza para el desarrollo integral del niño/a, constatándose que no existe ningún estilo que pueda considerarse el mejor por sí sólo, sino que es el total de experiencias de todos ellos lo que determina el desarrollo adecuado del individuo hacia su formación (Mosston y Ashworth, 1994).
En la actualidad las sociedades modernas conceden una estrecha relación entre educación y desarrollo individual
...