Lectura del artículo “Patología general de la evaluación educativa” escrito por M.A Santos Guerrera (1988)

Dentro del artículo “Patología general de la evaluación educativa” se fundamenta prácticamente en puntualizar las problemáticas que con el paso de los años sigue presentando el proceso de evaluación dentro del ámbito de la educación desde distintas perspectivas como son las ideologías, la política, la ética, la didáctica entre otros, dando un enfoque  que desvaloriza el verdadero sentido de la evaluación.

Este tema se desglosa en 8 subtemas relacionados con la forma que toma la evaluación dentro del aula y como: solo evaluar al alumno, se evalúa solamente los resultados, se evalúan solamente los conocimientos, solo se evalúan los resultados directos, pretendidos, solo se evalúan los efectos observables, se evalúan principalmente la vertiente negativa, solo se evalúa a las personas, solo se evalúa cuantitativamente, se utilizan instrumentos inadecuado entre otros, de esta manera el autor nos plantea la mala orientación del proceso evaluativo dentro de la educación de tal manera que las vertientes ya mencionadas descontextualizan la evaluación de tal manera que hoy en día es tomada solo como un requisito de relleno dentro de la enseñanza y el proceso de aprendizaje.

El autor señala que no se debe de rechazar el aprendizaje de contenidos, porque son necesarios para fortalecer el desarrollo del pensamiento entre otras, pero tampoco se toman en cuenta otros pretendidos logros que se contemplan mediante el proceso de enseñanza tales como serian: actitudes, destrezas, hábitos y valore. 

 Por otro lado fundamenta a  la patología  de la evaluación, como un conjunto de desórdenes del proceso evaluativo dentro del aula donde con frecuencia los maestros afectan a sus alumnos de manera individual y por consecuente fractura las relaciones entre compañeros, debido a la mala utilización de la evaluación en donde muchas veces los docente hacen parecer que la evaluación es solo de sus responsabilidad  lo cual le permite atribuir casualidades, catalogar ética-mente, justificar decisiones y clasificar a cada alumno asignándole un valor numérico.

De esta manera el autor sustenta que es un error someter a los alumnos a una evaluación sin tener en cuenta las condiciones, los medios, los tiempos, los contextos en donde se desarrollan los alumnos por lo cual la evaluación debe estar abierta a diversos cambios, que pueden ser modificados y mejorados por los alumnos y el profesor.

En base a la lectura de Jonh Dewey “la ciencia de la educación  este autor también menciona que muchos docentes ven a la ciencia de la educación como un proceso de aprendizaje, el cual nos deberá arrogar un valor numérico para valorar si un alumno es bueno o malo.

Generalmente los docentes no toman en cuenta la manera de evaluar de manera cualitativa enfatizando el logro del desarrollo de habilidades, aptitudes valores, destrezas e incluso la creatividad de sus alumnos.

Pero pienso que pase a esto que a veces fractura la verdadera tarea del proceso evaluativo debemos concebir que la evaluación es de gran ayuda para los maestros como para los alumnos, ya que para los docentes les demuestra la capacidad o las habilidades que tiene cada alumno, y para los alumnos la evaluación, debe permitirles saber que es lo que deben mejorar en cuanto a sus conocimiento o habilidades de tal manera que esto lo motive a salir adelante, por esto creo que la evaluación brinda resultados negativos o positivos por si misma, lo importante es que como docentes y alumnos debemos ver los resultados buenos o malos que arrogados como un factor para el bien de quien fue evaluado, en lugar de utilizarla como una etiqueta que los denigre.
La evaluación siempre funcionada cuando se utilice de acuerdo a criterios que sean necesarios de  observar de acuerdo a las diferentes situaciones que presente nuestro alumnado.